Roberto Armando Cruz Miranda (34) llegó en plena madrugada de este martes a la casa de su ex pareja con una pistola calibre 40.
Según informa el Sol, «Abrime que te voy a matar», eran los gritos que resonaban en el pasillo donde reside la mujer. Cuando policías llegaron a auxiliar a la víctima, no dudó en agredirlos con su arma de alto calibre. Tras darle dos balazos a uno de los efectivos, otro lo abatió para salvarle la vida a su compañero.
Tras el conmocionante episodio, el funcionario herido quedó en grave estado y en las últimas horas pasó a Terapia Intensiva porque quedó comprometido de los intestinos. Para las autoridades policiales del sur provincial, los dos uniformados que intervinieron en el hecho «evitaron un femicidio».
Los detectives del caso están convencidos de que Cruz Miranda, más conocido como el Sapo, fue hasta el lugar con la intención de matar a su ex novia. Esto porque, horas antes, el sujeto ya había amenazado a la víctima.
Fue cerca de las 22 cuando la mujer, de 34 años, realizó un primer llamado a la línea de emergencias 911 para advertir que su ex la había «molestado».
Policías se dirigieron hasta la casa de la víctima para verificar la situación, debido a que no detectaron la presencia del denunciado, se retiraron, revelaron fuentes allegadas a la causa.
Los efectivos tomaron conocimiento de que el sujeto tenía un antecedente por amenazas y una restricción de acercamiento hacia la mujer, por lo que derivaron el caso a la Justicia y un ayudante fiscal de turno tomó intervención.
Ante eso, se realizó la identificación del sospechoso y se estaba analizando pedir su detención. Pero antes de que se tomara una decisión, Cruz Miranda se dirigió pasadas las 4.30 a la casa la víctima, en calle Suipacha al 740, ubicada en las cercanías del centro sanrafaelino.
Con el arma en su mano y a los gritos, el sospechoso empezó a llamar a la puerta de la mujer, quien atemorizada logró contactarse nuevamente con el 911 para pedir auxilio.
A los pocos minutos, dos uniformados de la Comisaría Octava, localizada a sólo cuatro cuadras de la escena, arribaron al lugar. Apenas descendieron de la movilidad, el agresor notó su presencia y empezó a los tiros, detalla la información policial.
Fue allí cuando dos de los plomos le impactaron en la espalda a un auxiliar, de 40 años. Tras quedar tendido en el piso, Cruz Miranda se acercó para rematarlo de un disparo en la cabeza, pero fue automáticamente abatido de dos balazos por el otro policía.
El funcionario herido fue trasladado de urgencia al Hospital Schestakow, donde se constató que los proyectiles le dieron en el hombro izquierdo y la región lumbar. Al parecer, esa última lesión le comprometió los intestinos, por lo que ahora lucha por su vida.
Fuente y fotos: Gentileza el Sol
