Del periódico estadounidense Washington Post al francés Le Figaro, de los sitios tradicionalistas a los corrillos de las distintas conferencias episcopales, todos alimentan los rumores de una posible dimisión del papa Francisco. ¿En qué se basan? Primero, en una frase en privado que el Pontífice le expresó a obispos italianos, a quienes, hablando de los problemas ligamentarios de su rodilla, les dijo ¿»en broma»?: Más que «operarme, renuncio». Sin embargo, lo que terminó de instalar la posibilidad de un paso al costado de Bergoglio fue el anuncio de su visita, el próximo 28 de agosto, a la ciudad de L’Aquila, donde se encuentra la tumba de Celestino V, sobre la cual Benedicto XVI colocó su estola en 2009, 4 años antes de abandonar la jefatura de la Iglesia Católica.
Para agregar más datos que atizan conjeturas, este viaje se producirá entre un consistorio (el 27) y la reunión de todos los cardenales sobre el tema de la reforma (29 y 30 del mismo mes). Es decir que el Vicario de Cristo convoca a los príncipes de la Iglesia de los 5 continentes pero luego se ausenta, aunque sólo sea por medio día.
Desde el Vaticano descartaron los rumores, que se han vuelto más potentes que incluso hace un año, cuando el Papa argentino fue operado de una «estenosis diverticular». Ahora Francisco padece fuertes dolores en la rodilla y se desplaza casi exclusivamente en silla de ruedas.
SU MENSAJE
La Santa Sede tiene argumentos para refutar las versiones: en julio, mes que normalmente reservaba para las vacaciones, el Pontífice realizará dos exigentes giras, una a Africa (Congo y Sudán del Sur) y otra a Canadá. Y en la audiencia general de los miércoles Bergoglio también pareció aventar cualquier renuncia al exaltar la vejez, las enfermedades y las fragilidades relacionadas con ella.
En esa línea, criticó la «obsesión» por la juventud, especialmente los retoques estéticos y exceso de maquillaje. Por eso, ponderó a la gran actriz Anna Magnani, quien le pidió a su maquilladora que no tapara sus arrugas porque había tardado mucho en tenerlas.
