Sus inicios en el fútbol femenino fueron en Las Panteras de San Rafael y el año pasado la arquera local Brisa Antonella Río arribó al Club Atlético Lanús para cumplir el sueño de estar en el fútbol grande de nuestro país.
A sus 17 años, la guardameta tuvo una excelente temporada y fue así que la Asociación del Fútbol Argentino la convocó para formar parte de la preparación que tuvo el elenco nacional, comandado por Carlos Borrelo, que disputaba el Campeonato Sudamericano Sub 20 en nuestro país y que iba a jugar la fase final pero se suspendió a causa del Covid-19.
Aprovechando la cuarentena obligatoria, Brisa se encuentra en nuestro departamento junto a su familia y se prepara para lo que será el regreso a la actividad con su club y también con el seleccionado nacional, que nuevamente estará en el proceso para las próximas competencias.
En diálogo con Diario San Rafael, la deportista se refirió a su presente y remarcó: “Actualmente vivo la cuarentena en mi casa, entrenando a través de la plataforma Zoom con Lanús, me llamaron otra vez de la selección y estamos trabajando con el cuerpo técnico desde el miércoles pasado”.
“Ahora trato de entrenarme en casa con lo que tenga a mi alcance, pero es muy difícil, porque al ser arquera no hay un lugar para tirarse y realizar trabajos específicos que siempre hacemos”, subrayó de los trabajos que realiza.
De su vida en Buenos Aires y cómo la sostiene contó: “Al principio costó muchísimo, pero con ayuda de mis compañeras pude salir adelante, ahora sinceramente ya me acostumbré, Lanús me dio un departamento para vivir. En la mañana voy al colegio, donde este año ya termino el secundario, mientras que en la tarde voy a entrenar y los fin de semana juego”.
Respecto al crecimiento que ha tenido el fútbol femenino detalló: “No solamente Lanús creció, sino la mayoría de los clubes de Buenos Aires. Desde que se hizo profesional el fútbol femenino, hubo un gran cambio, no sé si hasta un 100%, pero sí un gran cambio. Yo hoy gracias a dios puedo estar y vivir con el fútbol, con esfuerzo pero puedo, y es grande a nivel nacional por lo realizado por el presidente de la AFA, Claudio Tapia”.
Sobre lo que implicó estar en el seleccionado nacional, subrayó lo siguiente: “Mi paso por la selección fue una de las mejores cosas que me pasaron en la vida, poder dormir, comer, entrenar y jugar ahí es algo que no me voy a olvidar nunca. Más sabiendo que hoy por hoy estoy de vuelta, me siento muy contenta, agregando mi presente con Lanús, estoy con primera división y entreno juntos con ellas”.
Asimismo dijo: “En la selección a la mayoría de las chicas ya las conocía por el tema de que ya nos hemos cruzado jugando en contra. Pero ahí dentro en selección es otro trato, ahí somos compañeras y no rivales. Del seleccionado realmente me sorprendió todo para bien”.
En cuanto a su referente en el puesto, expresó: “Yo admiro muchísimo a Brenda Molinas, quien es compañera mía en Lanús y me ha enseñado muchas cosas en todo este tiempo”.
Al mencionar el regreso a la rutina, puntualizó: “De lo que pueda pasar el año que viene no sé, yo sigo entrenando, con ganas de seguir en Buenos Aires, espero que todo se solucione y volvamos de la mejor manera. Espero que volvamos este año para poder retomar los entrenamientos y estar con el grupo, ya que es muy difícil vivir sola allá y mis compañeras y el cuerpo técnico me han ayudado mucho”.
Finalmente mencionó a su familia y cómo viven su presente: “Todos están muy contentos y es lo principal, ya que me apoyan en todo, en especial mi mamá Gladys”.
