Producto de una resolución, a partir del 1° de abril se implementará un nuevo régimen de percepción del IVA, por las ventas de productos de consumo masivo que se realicen entre sujetos que revistan la calidad de responsables inscriptos en el gravamen. En consecuencia, se viralizó en las redes sociales la idea de que se esté obligando a los comerciantes a pagar un 3% anticipado del impuesto al consumo, en productos alimenticios y artículos de limpieza.
A partir del 1° de abril, de acuerdo a la resolución, se pondrá en marcha este programa de monitoreo fiscal con el objetivo de evitar la evasión fiscal en los comercios, pero lo que generó malestar es que el programa se va a financiar con un adelanto del 3% del IVA. En diálogo con FM Vos (94.5) y con Diario San Rafael, el tributarista Guillermo Poch, señaló que “es una percepción, es un pago a cuenta del 3%”. “Lo que el fisco hace es pedir por anticipado la plata del IVA”, señaló. Es decir, que lo que se cobrará es un impuesto sobre una ganancia presunta, ya que el comerciante deberá pagar impuestos sobre una venta que aún no hizo. “Lo que termina sucediendo, es que el comerciante, si bien paga un 21%, con un 3% de percepción termina teniendo un costo total en el impuesto del 24%”, advirtió. Más allá de que hayan intentado desmentirlo desde el Gobierno, “en la práctica es así”. “Si el comerciante no tiene mucha liquidez, de alguna manera esto lo termina perjudicando”. “El propósito por el cual hace el fisco esto, es anticipar una posible omisión de gravámenes en esta última etapa. Como siempre el IVA se paga en una última etapa, lo que se está tratando de hacer es que más allá de que se percepcione o no esa venta, ya el agente de percepción ingresó un 3% de IVA. Son alternativas: una para aumentar la recaudación y también para actuar como una medida anti- elusiva”, aseguró.
Por supuesto, esto tendrá un impacto en los precios, ya que cuando hay un aumento en la carga tributaria se traslada al producto y al bolsillo del comprador.
Cabe decir que la aplicación práctica de la medida, arrancará en vigencia el próximo sábado (1° de abril). Si bien no se descartan medidas judiciales, en general el pequeño comerciante –que es el más perjudicado– no cuenta con los recursos como para ir a la Justicia.