Durante la mañana del miércoles 14 de septiembre, el gobernador Rodolfo Suarez, junto al superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli, inauguraron el reservorio del Canal Vila, ubicado en el distrito Rama Caída. El mismo consta de una capacidad de 25.000 metros cúbicos para cubrir casi 1.000 hectáreas, por lo permitirá flexibilizar el sistema de riego, aumentando la eficiencia en la distribución del agua. Esta obra que fue inaugurada en el día de ayer, es la más grande que ejecuta Irrigación con financiamiento propio en lo que respecta a este año. Por esto, en FM Vos 94.5 dialogamos con el superintendente de ese organismo.
«La política pública hídrica de Mendoza data desde el siglo XIX con la ejecución de una Ley de Aguas. Después en el artículo 16 de la Constitución se constituyen todos los pilares de esta clase de política en relación a los recursos hídricos. En este sentido, es que se proyectaron distintos planes pero que no abarcaron en el tiempo más de tres o cuatro años, puesto que fueron más bien direccionados a las obras. Entonces, como en nuestra provincia no hubo nunca un plan a largo plazo, observamos que un país como Israel, ha hecho un uso del agua y una mejora de la productividad. En este horizonte es que aparecen ellos como capaces de generar propuestas sostenibles», comentó el superintendente al inicio de la charla.
«Son planes maestros de cara a los próximos 30 años, y consisten en un análisis de recursos hídricos con el fin de conocer la disponibilidad de agua que vamos a tener en las siguientes décadas. Por otro lado, se va a proyectar la demanda futura a partir de la matriz productiva actual en relación a distintos escenarios futuros. Seguramente el agua sea más escasa, más de lo que es ahora. Ante esta situación, el trabajo final será saber cuáles van a ser las obras y las acciones necesarias para cubrir una demanda cada vez más creciente, ante una cantidad de agua cada vez más menor», agregó.
Luego, se refirió a los ejes de acción sobre los cuáles se deberán planificar las obras a partir de este estudio. «Hay tres ejes sobre los cuales ya estamos empezando a trabajar. Uno tiene que ver con un Código de Aguas, esta nueva propuesta viene a codificar el régimen de aguas vigente en la provincia de Mendoza y permitirá integrar y actualizar sistémicamente las diversas normativas que no están contemplados en la ley, como la cuestión ambiental que genera el juicio con La Pampa o los problemas interjurisdiccionales, entre otros. El segundo eje refiere a lo técnico, mientras que el tercero es un fondo permanente de financiamiento para obras hídricas a futuro. Se debe cambiar el enfoque, trabajar sobre la demanda y no sobre la oferta, ya que sabemos que esta es escasa. Esto es lo que venimos haciendo hace cinco años, con el objetivo de tener una mayor eficiencia de los recursos», aseguró Sergio Marinelli.
«Nosotros tenemos una medición de toda el agua que entregamos, medimos el caudal de agua que ingresa a la planta de Aysam y lo mismo sucede con cada canal de riego. La única forma de administrarla es mediante la medición y sabiendo en qué la gastamos. El 13 octubre vamos a dar el pronóstico de todos los ríos de la provincia en el Centro de Congresos y Exposiciones de San Rafael. La medición es la mejor manera de conocer si usamos el gua con eficiencia», aclaró.
Después, se refirió al tema central de esta nota y que tiene que ver con la inauguración del reservorio del Canal Vila. «Se llevó a cabo la apertura este miércoles al mediodía y contamos con la presencia del gobernador Rodolfo Suarez. Esta es la obra más importante que hemos realizado con financiamiento propio. La misma tiene como fin flexibilizar el riego, mientras que vamos llevando una cuenta del agua para que cada uno la use cuando la necesita. En este caso, los agricultores podrán pedir el agua cuando y cuanto quieran, esto es lo importante de este proyecto, la gestión de este recurso, ya sea para el uso específico de una chacra o viñedo. En la misma hay una serie de registros para que el propio usuario pueda hacer un control personalizado sobre su uso y de ese modo, conocer quién la gasta y para qué. Yo creo que cada agricultor debe decidir cuándo gastar su agua en la medida de que el sistema lo permita. Este es el enfoque de este plan y la dirección hacia la cual vamos. Queremos brindar herramientas a través de las obras públicas, pero buscando inversiones en el sector privado que mejoren la eficiencia de la misma», señaló.
Para finalizar, emitió su opinión sobre la decisión del gobernador de la provincia de Mendoza de avanzar con la construcción de la presa El Baqueano con los fondos de Portezuelo del Viento, y la polémica desatada luego de que el Centro de Ingenieros de Mendoza calificará como ‘desacertada’ su ejecución. «Me parece que, si uno dice algo a destiempo, no es una propuesta sino una crítica y no suma nada. El Baqueano es la única obra que tiene la posibilidad de hacerse rápidamente, puesto que a las otras les hacen falta muchísimos estudios y para licitarlas habría que esperar cerca de dos años, por lo que tendríamos los fondos paralizados. El río Mendoza está totalmente sobreexplotado. Lo mismo sucede con el Río Tunuyán, por lo tanto, el Estado debe poner la mira sobre el sur provincial en cuanto a la promoción y el desarrollo futuro. Hay que buscar un equilibrio. Acá también tenemos problemas de agua, pero hay una gran capacidad de embalse. Además, tenemos la posibilidad de generar energía, que es lo que necesitamos para mejorar todos los sistemas. La energía es carísima, pero a futuro quizás la podamos utilizar de otra manera, y creo que con productividad se puede pagar. Me parece que la decisión del gobernador ha sido correcta», cerró Marinelli.
