Maia es muy chiquita. Tiene tan solo siete años, pero a pesar de su corta edad sabe muy bien lo que es la solidaridad. Y tuvo un enorme gesto con los más necesitados por la pandemia del coronavirus.
Se le cayó el primer diente y cuando se fue a dormir lo dejó debajo de la almohada esperando que llegara el «Ratón Pérez». Al otro día cuando se levantó había recibido 400 pesos que sin dudarlo decidió donarlos. Tenía pensado comprarse un diario íntimo, pero prefirió ayudar.
Su mamá le preguntó qué quería hacer con el dinero y ella sin dudarlo le contestó: «Lo quiero donar para la gente que más lo necesita«.
Junto a su familia vive en la localidad cordobesa de La Falda, su papá es policía y su mamá trabaja en Desarrollo Social el Municipio. «Ella está al tanto de todo. Muchas veces acompañó a mi esposa a armar los bolsones de comida para entregar a la gente más necesitada. Además, los abuelos tienen un merendero al que ella visita. Está en contacto con la realidad de los más necesitados», relató Maximiliano, su papá.
Maia puso la plata en un sobre y ella misma quiso ir a entregarlo. Fue recibida por el encargado del departamento de Desarrollo Social, quien muy agradecido recibió la donación. «El hombre después nos dijo a mi esposa y a mí que nos devolvía el dinero, pero nosotros le dijimos que no porque había sido la decisión de Maia», concluyó Maximiliano.
Lo cierto es que al enterarse del enorme gesto que tuvo la nena, desde un medio local se acercaron a su casa y le regalaron el diario íntimo que tanto quería.
Fuente: TN
