La Policía Rural informó que, ese día, personal que realizaba maniobras operativas en alrededores del cerro mencionado observó un auto sin ocupantes, estacionado sobre una picada ganadera. Por ello, y presumiendo que se trataba de cazadores furtivos, los uniformados quedaron en las inmediaciones hasta que transcurridos unos minutos cuando observaron que el rodado circulaba con dirección hacia ellos. Al detener su marcha, los efectivos comprobaron que el vehículo era ocupado por tres hombres y un menor de edad y, al realizar la inspección del auto, encontraron dos piches con vida, uno muerto y una liebre criolla sin vida.
Por directivas del ayudante fiscal en turno se liberaron los animales con vida a su hábitat natural, y luego se trasladó a los aprehendidos junto con el auto, cinco canes y los animales cazados a la Subcomisaría de Rama Caída donde quedaron alojados por infracción a la Ley Nacional 22421.