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  • La vida es un 10% lo que te sucede y un 90% de cómo reaccionas a ello.| Charles R. Swindoll

jueves 25, de abril , 2024

“Debería haberme puesto la maldita vacuna”: el lamento de un hombre antes de morir

Micheal Freedy, conocido por sus amigos como “Big Mike” falleció a las 39 años por coronavirus. El hombre y su esposa, Jessica DuPreez, habían decidido no aplicarse ninguna vacuna inmediatamente y postergarla para un año porque querían esperar a ver los efectos que tenía en la población. Sin embargo, la vida les jugó una mala pasada.
Tres semanas la pareja y sus cinco hijos habían dejado su hogar en Las Vegas, Nevada, para ir dos días a San Diego, California. Sin embargo, cuando regresaron a su casa él no estaba bien de salud: tenía falta de apetito, fiebre, mareos y nauseas. Al comienzo no le atribuyeron su malestar al covid-19 sino a unas graves quemaduras de sol que tenía.

“Debería haberme puesto la maldita vacuna”: el lamento de un hombre antes de morir

“Debería haberme puesto la maldita vacuna”: el lamento de un hombre antes de morir
Tras visitar una sala de emergencia fue notificado que tenía el virus. Le recomendaron hacer reposo y controlar la fiebre así como la saturación del oxígeno. Luego de 96 horas, su condición se veía empeorada y fue de nuevo al hospital. “Su nivel de oxígeno en sangre era bajo y el personal del hospital estaba sorprendido de que incluso pudiera caminar y hablar”, contó su esposa.
Debido a que su estado era muy complejo, fue trasladado a un mejor establecimiento y fue ingresado a la Unidad de Terapia Intensiva de manera inmediata. Fue en ese momento que le envío un mensaje de texto a su esposa contándole lo arrepentido que estaba de no haberse vacunado a tiempo. Debido a la preocupación generada, Jessica inoculó a sus cinco hijos ese mismo día.

“Debería haberme puesto la maldita vacuna”: el lamento de un hombre antes de morir

“Debería haberme puesto la maldita vacuna”: el lamento de un hombre antes de morir
Horas después de su ingreso al hospital, la mujer recibe el peor llamado: su esposo había fallecido de coronavirus. “Solo tenía 39 años. Nuestros bebés ahora no tienen papá. No se puede decir ‘soy joven y eso no me afectará’, porque lo hará. Esperaba vivir 30 años más con él”, declaró.
Fuente: Radio Mitre
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