El año 2022 llega a su fin, por eso desde la Dirección General de Escuelas (DGE) realizaron un balance de gestión sobre el ciclo lectivo que acaba de concluir. El director de la DGE, José Thomas, se refirió a esta etapa de pospandemia en las aulas de las escuelas mendocinas, y explicó todo lo que viene en materia educativa en la provincia.
«Lo más importante para señalar es que este ha sido el primer año de gestión sin pandemia y con presencialidad absoluta en las aulas. Los dos años anteriores fueron muy complejos, con una virtualidad casi total, con burbujas en las escuelas y otros tipos de aislamientos. Por suerte, este 2022 ha sido muy satisfactorio en términos de recuperación de los aprendizajes. La tarea fue ardua con todos los docentes, directivos y profesores. Estuvimos muy focalizados en recuperar los saberes. También realizamos el Censo de Fluidez Lectora que nos permite hacer un seguimiento nominal sobre las trayectorias de cada uno de nuestros estudiantes», señaló al inicio del reportaje.
«A principios de este año, con la instrumentación del Censo de Fluidez Lectora nos encontramos ante una situación compleja. Hubo algunos casos relacionados con tercer grado, donde el 30% de los chicos se hallaba en situación crítica con respecto a la alfabetización. Por eso se implementaron muchas políticas directas en las escuelas. Se trabajó junto a los docentes y se concretaron talleres de alfabetización y jornadas extendidas. La hora extra que determinó la Nación, la utilizamos para que 164 escuelas tengan jornada completa. Con toda esta labor, se logró reducir esta situación crítica al 10%. Sigue siendo un nivel alto, pero con números similares y previos a la pandemia. Creemos que estas políticas que estamos llevando adelante, como el seguimiento nominal de cada uno de los estudiantes con el apoyo de los docentes, fortalecen la trayectoria escolar de los chicos», añadió José Thomas.
«Se obtuvieron buenos resultados tanto en nivel primario como secundario, en un contexto donde la educación argentina no atraviesa su mejor momento. No obstante, la curva que observamos en la provincia de Mendoza es ascendente y eso nos genera esperanza. Hay un gran compromiso entre docentes, directivos y supervisores, para lograr que los chicos aprendan a leer en tiempo y forma», amplió el titular de la DGE.
Por otra parte, se expresó sobre la importancia de que los jóvenes sigan estudiando después de concluir el nivel secundario. «En relación a la educación superior, puedo afirmar que cada vez tenemos más estudiantes. Hoy los chicos quieren continuar con los estudios. La secundaria en Mendoza actualmente tiene una mayor cantidad de egresos, de a poco se va progresando sobre algunos indicadores. En los niveles superiores se mejoró la calidad de los institutos y se abrieron distintas carreras con salida laboral rápida, puesto que la secundaria tiene esa deuda con el alumnado. La educación secundaria debe adecuarse a este nuevo siglo que estamos viviendo, para eso estamos trabajando con todos los supervisores de ese nivel. Hay que pensar cómo acercar la secundaria a la universidad y que el alumno pueda emplearse cuando la haya terminado. En ese sentido es que recorrimos toda la provincia para conocer cuáles son las necesidades de la matricula en términos de formación. Es una labor que debe ser continua y se debe mejorar año tras año», analizó Thomas.
Para concluir, se refirió a las capacitaciones docentes que se realizaron durante este 2022. «Este año se implementaron, más allá de las establecidas por ley, jornadas los días sábados que son pagas. Hubo mucha concurrencia y se trataron temas puntuales como alfabetización y la trayectoria de los alumnos. Entendemos que la formación continua es fundamental para el trabajo educativo, por eso se suman propuestas de manera permanente con formatos presenciales y virtuales. Lo más relevante de todo, es que los docentes se suman de manera masiva a cada una de ellas», concluyó.
