Las declaraciones de Javier Milei acerca de frenar la obra pública generaron un gran revuelo dentro del sector de la construcción. Debido a que esta actividad es una de las que ocupan más mano de obra, desde FM Vos 94.5 hablamos con Gerardo Fernández, presidente de la Confederación de Pymes Constructoras de la República Argentina, para saber cómo tomaron el anunció que hizo recientemente el presidente electo.
«Creo que en este momento, antes que nada, debería primar la prudencia, aunque se entiende que tras los dichos del presidente electo se genere angustia y zozobra en el sector. En ese sentido, me parece necesario hacer una lectura completa del panorama. Dentro de los diferentes anuncios de Milei, uno de ellos habla de la reducción de los ministerios. Ahora bien, esta reducción no alcanza al ministerio de Infraestructura, por lo tanto, entiendo que de cierto modo la obra pública continuará. La misma está comprendida por infinidad de acciones del Estado en las distintas ciudades y pueblos del país, por ello suponemos que cuando se refiere a poner un freno a la obra pública está hablando de obras de gran magnitud: como aeropuertos, represas, etc», explicó Gerardo Fernández al inicio de la entrevista.
«Este tipo de obras consumen muchos fondos, mucha tecnificación, maquinaria y poca mano de obra. Por esto mismo, pueden ser los privados quienes más estén interesados en invertir en ellas. No me parece bien prejuzgar antes de ver las acciones concretas. La Pyme de la Construcción es la gran contenedora social, ya que reorganiza a la sociedad civil. Sería la herramienta más eficaz para salir de los planes sociales», agregó.
Después, se refirió a la propuesta de Milei, la cual sostiene que las obras públicas se deben adjudicar a los privados para que luego este mismo sector las explote. «Me parece que el sistema ‘a la chilena’ en ese país consume entre un 15 y 20 % del presupuesto, es decir que es como una especie de sistema paralelo subsidiario. De igual manera, resulta muy atractivo para las empresas constructoras empezar a participar en planes que no sean obras de un año. Sería interesante poder participar en un segundo negocio, como es la construcción de una ruta a largo plazo», remarcó Fernández.
«El inconveniente radica en que para que eso se pueda llevar adelante, se tienen que dar un montón de condiciones que hoy no están dadas. Primero hay que ordenar la macroeconomía. De hecho, en el gobierno de Macri se intentó hacer eso y no se construyeron prácticamente viviendas. Se intentó sustituir el sistema del subsidio a la oferta por subsidio a la demanda. Este último sistema es bueno y estamos de acuerdo en que ese es el camino. El tema es cómo se llega a la implementación de dicho sistema», aclaró.
«No se le puede pedir a una empresa que hace meses que no cobra y está en rojo con el banco, que invierta. No tiene con qué, entonces todo se transforma en una utopía. No se puede sustituir un sistema por completo en un mes, porque lleva a un colapso inmediato de la industria con las consecuencias que esto último tiene», enfatizó el presidente de la Confederación de Pymes Constructoras de la República Argentina.
Para concluir, dijo que el sector que él representa viene golpeado desde hace bastante tiempo. «El desorden de este momento produce incertidumbre y angustia. Hace cinco meses que llevamos con una eventual parálisis en la industria. Por eso, hay una necesidad de resolver la situación inmediatamente. Tenemos que ser prudentes y esperar a que se definan las políticas a aplicar. También el presidente electo aseguró que se van a respetar los contratos, lo cual significa que las empresas deberán terminar las obras que tienen contratadas. Hoy hay que llevarle tranquilidad a la sociedad, tenemos que tener la responsabilidad de no actuar sobre impresiones subjetivas, sino sobre datos objetivos. El gobierno que resultó electo aún no asumió, hay que esperar y actuar en base a las acciones concretas que se ejecuten», finalizó.
