La investigación judicial que se inició después de la muerte del delantero del club Godoy Cruz Antonio Tomba Santiago el Morro García se dirige a un solo camino. Está en manos de la fiscal de Homicidios Claudia Ríos y apunta a determinar si hubo o no instigación al suicidio. De lo contrario, el expediente será archivado.
Es la obligación investigativa que tiene la fiscalía cada vez que ocurre un hecho de estas características, ya que debe confirmar o descartar algún tipo de sospecha delictiva.
Para eso, comenzó a tomar declaraciones de su círculo intimo y analiza todas las pruebas incorporadas, como testimoniales, necropsia y peritajes desarrollados sobre el arma de fuego calibre 22 que utilizó el futbolista para quitarse la vida.
Durante este domingo, de acuerdo lo informado por la fiscal de la causa, declararon en sede judicial la madre y el hermano (vinieron al velorio desde Uruguay), la ex pareja y madre de la hija del Morro –vía Skype– y también un jugador amigo de la misma nacionalidad del jugador.
Ante el desconcierto que reina socialmente ante este tipo de hechos, la representante del Ministerio Público dio una conferencia de prensa la tarde de este domingo y aclaró la situación ante la información que circula con respecto al expediente. Además, confirmó que el día estimado de fallecimiento del futbolista.
“Santiago García falleció durante la madrugada del 4 de febrero”, sentenció la magistrada luego de estudiar las conclusiones del Cuerpo Médico Forense. Y señaló que «en la escena no hubo participación de terceros», confirmando de esta forma que se trató de un suicidio.
En ese orden, explicó que “todo está en el marco de la investigación”, y que se iba a “determinar el origen del arma, si estaba a su nombre y si participó de otro hecho”.
Lo que se investiga
Básicamente, suicidio significa matarse a sí mismo. Y la instigación tiene dos variantes penalmente hablando: es un delito doloso contemplado en el Código Penal. Una mediante amenazas, consejos, bromas y órdenes; y la ayuda comprendida como la “colaboración material”. Se castiga con represión de 1 a 4 años de encierro.
De acuerdo con información a la que accedió El Sol, por las pruebas recolectadas, prima facie los investigadores no han encontrado elementos para sostener instigación al suicidio.
Más allá de eso, Ríos aclaró que en este tipo de hecho “es una regla general” investigar si hubo instigación.
Fuente. El Sol
