El observatorio de ACOVI determinó este año que el costo de cosecha significa el 30 % del costo anual de producción de vid

El Observatorio de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (ACOVI) realizó la presentación del Informe de Costos de Cosecha 2022, en el cual se detallaron datos y estadísticas de la última Vendimia. Durante la jornada, se destacaron varios aspectos respecto a la última cosecha y se remarcó que el escenario quedó configurado con una relativa escasez de mano de obra, y una inercia inflacionaria pocas veces vista presionando al alza el precio del tacho de uva, factor que explica entre el 68% y el 79% de los costos de cosecha manual, dependiendo del marco analizado. El Sub Gerente de la entidad, Nicolás Vicchi, dialogó al respecto con FM Vos (94.5) y Diario San Rafael.
“Desde nuestro observatorio, hace años que venimos observando los costos de cosecha que tienen nuestros productores. Según nuestros análisis, la cosecha representa el 30 % de los costos anuales, y es en este escenario donde con los especialistas hemos abordado la comparación con la temporada pasada, frente a tres modalidades que nosotros tomamos en cuenta, que son la cosecha manual, que es la más utilizada, la cosecha asistida o semi mecánica que es la que se realiza con bins, y la cosecha mecánica que directamente no necesita mano de obra. Nos preocupa que la cosecha manual haya tenido un incremento en los costos, respecto a 2021, de hasta el 75 %. Los motivos son varios; por un lado, la escasez de mano de obra que ha elevado el costo de la ficha, la inflación que termina repercutiendo en los costos de los fletes, y la problemática de los combustibles -que anticipamos sucedería-. A los productores les perjudicó mucho no tener la disponibilidad de mano de obra necesaria para poder cosechar la uva en el momento que la necesitaba y con las características necesarias. Frente a estos escenarios, tratamos de determinar cuáles son los modelos que le convienen utilizar a un productor» explicó Vicchi.
«El estudio base lo realizamos sobre un productor que posea diez hectáreas, y en la medida que se aumenta la cantidad a cosechar, y luego de efectuar diferentes comparaciones entre uvas tintas y blancas -que rinden diferente- conviene utilizar cosecha asistida. Los motivos son varios; en primer lugar, el costo es menor que la cosecha manual, ya que se necesita menos gente. Por ejemplo, para levantar de la planta ciento cincuenta quintales, con cosecha manual se necesitan quince personas, y con cosecha asistida diez; además el cosechador realiza menos esfuerzo físico porque tiene el bin cerca de la hilera, disminuye los riesgos de accidente, y se mejora la calidad de la cosecha. Desde nuestras conclusiones recomendamos que se generen políticas públicas que fomenten el uso de la cosecha asistida, pero, a través de las empresas de servicios o de proyectos asociativos”.