Después de declarar prescripto el caso, la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional decidió someter a un “juicio por la verdad” al médico Alberto Cirulnik, acusado del abusar sexualmente de niños que, en el momento de los hechos, tenían entre 8 y 11 años.
“Yo quiero un juicio tradicional y que tenga su condena, pero esta alternativa a uno lo reconforta”, expresó Darío Schvartz, uno de los querellantes, en diálogo con TN.
Según explicó la abogada que representa a los denunciantes, Nadia Rivas,esta resolución “significa que se hace todo el proceso, pero después el imputado no tiene una pena de prisión, sino que fijan una sentencia”. Sobre la decisión tomada, detalló: “La Cámara fundamenta que los tratados internacionales exigen que todos los niños y niñas deben tener acceso a la justicia. Teniendo en cuenta de que los denunciantes fueron abusados durante su niñez, abren la investigación por ese lado”.
Rivas indicó que aún no definieron si presentarán un recurso extraordinario para pedir la intervención de la Corte Suprema de la Nación o la apelación para solicitar un juicio común, con pena para el pediatra. Asimismo, aclaró que la defensa de acusado también puede apelar y pedir que declaren los delitos prescriptos. En ambos casos, tienen hasta fin de agosto para determinarlo.
Sin embargo, el estudio de abogadas considera que fijar una sentencia en el juicio por la verdad “está bueno para que se corra la impunidad” y entienden que sienta un precedente “ejemplificador” para otros casos: “No es que pasaron 12 años y como prescribe la causa nadie te puede denunciar. La Justicia abre una puerta interesante con esto, muestra que no te podes hacer el distraído con estos delitos”.
Por otro lado, la letrada cuestionó la postura de la ORT, colegio donde Cirulnik trabajó durante muchos años y en el que abusó de varios niños: “No tuvieron interés en contactarse con las víctimas ni brindarles apoyo, se vio el marcado desinterés en algo que pasó en ese espacio. Incluso, hubo un único comunicado que lanzaron y fue neutro, lo que resultó una decepción para los denunciantes, el hecho de que no hayan reaccionado”.
La palabra de Darío Schvartz sobre la decisión de la Justicia
Darío Schvartz, el primer denunciante, se refirió a lo que significa para él la decisión que tomó hace algunos días la Cámara de Casación: “Nosotros la denuncia la presentamos con el objetivo de tener un juicio tradicional, ganarlo y que tenga condena. La realidad es que quiero un juicio normal y que vaya preso por los delitos que cometió, pero esta alternativa a uno lo satisface, lo reconforta. Es una buena alternativa para obtener justicia, puede ser una opción sanadora”.
En ese sentido, señaló: “A partir del día que presenté la denuncia, mi estado de ánimo mejoró mucho. Surgieron muchas cosas positivas. Empecé a estar en contacto con otras víctimas y entendí que no estaba tan solo. Cada vez éramos más y eso fue bueno, en cierto punto, porque ahora estamos peleándola judicialmente juntos”.
Los casos y la denuncia
El nombre del pediatra Alberto Cirulnik se hizo conocido cuando Darío Schvartz, el hijo de un amigo, lo acusó de haber abusado sexualmente de él cuando tenía 8 años. Schvartz junto a otras dos víctimas, Malena Filmus y Leandro Koch, decidieron denunciarlo a fines de 2018. Esto sirvió como disparador para que alumnos y alumnas de la escuela comunitaria judía ORT pero también un sobrino, pacientes y estudiantes de otros colegios, fueran sumando sus testimonios, algunos como querellantes y otros como testigos. Actualmente hay 7 denunciantes, 3 con querella y 18 que no denunciaron en los tribunales, pero relataron sus experiencias ante la justicia.
Los testimonios son crudos y revelan un modus operandi de Cirulnik. El molde fue descripto por personas menores de edad abusadas en los años ‘80, ‘90 y 2000, en distintos ámbitos, que no se conocían entre si.
“Él aprovechaba el poder que tenía como médico. Vos sos un nene y si el médico te dice que tenés que hacer tal cosa, lo haces porque es la autoridad. En ese contexto, aprovechaba y abusaba de los chicos”, expresó Schvartz.
Cirulnik negó haber cometido los delitos y presentó un recurso de apelación. La respuesta de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional fue positiva y dictó el sobreseimiento de Cirulnik porque alegó que el delito prescribió tras haber transcurrido más de 12 años del último caso denunciado. Esto se resolvió y los denunciantes presentaron un recurso de casación, pero con la cuarentena estricta por el coronavirus hizo que el caso quedara relegado.
Con la resolución que lanzó hace días Casación, vuelve a reflotar el caso en el que decenas de víctimas piden justicia. “Es importante que se difunda porque si llega a haber alguna víctima perdida, puede enterarse de la situación y puede sacarse esa mochila de encima. Es difícil, pero lleva a un proceso de sanación”, concluyó la abogada Rivas.
Fuente y fotos: Gentileza TN
