Estiman una menor cosecha y ya hay quienes buscan uva en San Juan

Aunque todavía no hay ningún pronóstico de cosecha de parte del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), actores del sector ya se adelantan a una probable cosecha más baja y algunos incluso hacen contactos en San Juan para la compra de uvas.
Se evalúa que por las heladas tardías de octubre hay daño en zonas como el Sur provincial y algunos otros departamentos productivos, a lo que habría que sumar el granizo, el incremento en el consumo interno y las exportaciones, que han achicado el stock.
Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina, habló en FM Vos (94.5) de un problema estructural de la industria, que viene teniendo años con menos cosechas por la menor productividad de las viñas.
“Es la sensación que hay, hay bajo stock de vinos porque creció el mercado interno y la exportación, las cosechas suben y bajan de acuerdo a la situación climática, pero la producción viene bajando de 26 millones de quintales a 23 millones, hay un problema de envejecimiento de las plantas, poca rentabilidad de los productores; muchas bodegas salen anticipadamente a tratar de comprometer producciones, eso hace un clima hacia el aumento, aunque no se sabe cuál va a ser la cosecha”.
Villanueva remarcó que el 80% de los productores tiene menos de 20 hectáreas, que es la unidad mínima rentable, ahí hay un problema estructural, si la demanda sube y la producción viene en baja, es lógico que se produzca esto. Está pasando lo de ir a buscar uva a San Juan, alquilar fincas o comprometer elaboradores”.
En cuanto al pronóstico de cosecha del INV, dijo que “hay toda una discusión, antes se hacía una estimación en diciembre y otra en febrero, como hubo mucha diferencia entre una y otra estos años, se fue corriendo el pronóstico e incluso se hizo a fin de febrero, lo que pierde sentido”.
Sobre si todo este coctel de menos oferta y más demanda aumentará los precios al productor, Villanueva dijo que “seguramente que sí, la pandemia demostró que a la gente, si le das un precio razonable, le sigue gustando el vino, en 2016 y 2017 los precios se fueron muy arriba y la gente dejó de tomar vino”.