Ayer en horas de la mañana, vecinos de la Villa 25 de Mayo que desde hace años critican la falta del servicio de agua potable, ya con docenas de reclamos realizados de manera formal y muchas promesas por parte de las autoridades de Aguas Mendocinas (Aysam), se acercaron a hablar con el director, Juan Pablo Eraso.
Entre otras cosas, Eraso les dijo: “Yo he logrado que se priorice el tema de la Villa para empezar a conseguir soluciones. La solución de fondo es la ampliación de la planta, ¿se va a ampliar la planta hoy? No, todavía no logramos que empiece a construirse la planta de Balloffet que es la planta de todo San Rafael, con la que también tenemos problemas. Llevamos un año y medio con un proceso de licitación que fue a la Nación, desde donde van a salir los fondos, y la Nación recién la semana pasada ha resuelto que le demos para adelante con esto”. Uno de los vecinos mostró un archivo firmado por autoridades de Aysam el 13 de enero, en el cual se comprometían a tomar medidas que al día de hoy, siguen sin tomarse.
Diario San Rafael dialogó con algunos de los vecinos presentes, en virtud de la realidad que atraviesa cada uno.
Luis Manrique, uno de los damnificados, expresó: “Son promesas, las mismas de siempre, hace tiempo que estamos con problemas de agua en la Villa. Hace un mes vinimos, tuvimos una reunión, nos prometieron en la planta personal permanente, no cumplieron con esa promesa; prometieron arreglar un poco las cañerías también, más que nada en la entrada a mi casa, a controlarla, pero me pidieron número de teléfono, dirección y nunca fueron. También prometieron controlar la parte clandestina que había para ver si les ponían un medidor, que cumplan como todos, pero nada se cumple. Acá estamos otra vez, sin solución”. “Si tenemos que venir otra vez, vendremos y ya será todo el pueblo. Hoy vinimos pocos para no tener problema, pero la próxima va a ser más grande”, adelantó.
La vecina Gabriela Juri agradeció que hayan ido pocos vecinos, porque “los ánimos están caldeados y lo están con justa causa”. “No tenemos solución momentánea, esto es a largo plazo. Mañana la Villa no va a tener agua”.
“En mi caso, la situación ya tiene dos años. Hace dos años que cada uno empezó con bombas en sus casas, empezaron las piletas y las obras de turismo y ahí arrancó la falta de agua”, concluyó la señora Telma Alba.