Familiares y amigos de Abel Vázquez agredieron a una periodista

Tras escuchar la condena a prisión perpetua por el femicidio de Nélida Villar, familiares y amigos de Abel Vázquez agredieron verbal y físicamente a la periodista Magalí Espósito, quien cubría el juicio para LV19 Radio Nacional Malargüe. Al respecto, la comunicadora brindó detalles a FM Vos (94.5) y Diario San Rafael.
El lunes finalizó el juicio por la muerte de Villar, en el que Vázquez fue condenado a prisión perpetua (no así su esposa, que fue absuelta por el beneficio de la duda). En ese contexto, Espósito se encontraba trabajando al igual que periodistas de otros medios de comunicación. “Ayer junto a una compañera nos trasladamos al departamento de San Rafael, para darle cobertura a este caso que nosotros veníamos siguiendo, un caso que en Malargüe es de resonancia y que cuenta con la atención de todos los malargüinos. Al conocerse la sentencia, en la que se le dio cadena perpetua al acusado, todos los periodistas estábamos realizando nuestro trabajo, nuestra labor periodística para llevar la información a los distintos medios, nosotros como malargüinos tratábamos de que todos supieran lo que estaba pasando”, dijo, y recordó que al momento de realizar las distintas fotografías decidió acercarse al frente de los tribunales sanrafaelinos, por calle Emilio Civit, donde estaba la familia de los acusados. Al salir del palacio judicial, bajar las escalinatas y querer colocarse para tomar una imagen, recibió la agresión y, de hecho, no alcanzó a fotografiar. “Se me acercaron a agredirme, a insultarme, a amenazarme, a decirme ‘en Malargüe te la perdonamos, pero acá no te la vamos a dejar pasar’. La verdad es que fue un momento de mucha tensión, en la que se me acercó muchísima gente, pude reconocer a algunas de las personas que estaban ahí y bueno, inmediatamente la Policía se me acercó, me ingresó al palacio judicial, obviamente con muchos insultos, agresiones, una cachetada en la mano, un malestar físico que tengo ahora, calculo que producto de los nervios”, lamentó. Llevó a cabo la denuncia y personal del Cuerpo Médico Forense constató que tenía marcas en el cuerpo, producto de la agresión física.
La comunicadora destacó que esto es algo que no debería haberle ocurrido, no solo por su rol como periodista trabajando en un lugar público, sino por tratarse de una mujer. “Una entiende el dolor, la angustia, la molestia porque hay un familiar que va a pasar muchos años dentro de la cárcel, eso lo comprendemos, pero lo que no comprendo, no comparto y no respeto es la violencia que se genera, porque nosotros como medio siempre les dimos la posibilidad de hablar. Cuando ellos hicieron una marcha pacífica les dimos aire, les hicimos una nota, cuando se realizó la toma de testimonios en Malargüe dialogábamos con la familia y algo que destacábamos era la unión que ellos tenían como familia durante todos estos años de incertidumbre hasta llegar a este segundo juicio”, aseguró, y agregó que su compañera de trabajo Cecilia Dicésare también fue agredida verbalmente.