Un grupo familiar debió ser internado en el hospital Schestakow como consecuencia de haber inhalado monóxido de carbono.
En principio, el más complicado fue un niño de 5 años, a quien sus progenitores trasladaron en vehículo particular desde el barrio El Sosneado hasta el nosocomio público. Una vez en el centro asistencial, por prevención, todos fueron internados y quedaron bajo observación.
El monóxido de carbono es un gas que, en esta época del año, se desprende de aparatos de calefacción que no están bien calibrados o bien se encuentran instalados en lugares con insuficiente ventilación.
Por el hecho quedó abierta una causa que se instruyó en la Comisaría 38ª.