Algo que puede apreciarse a simple vista es el avance en la obra que el Municipio está desarrollando en el lugar donde se emplazaba la antigua terminal de ómnibus de San Rafael, habiendo empezado la construcción del sector comercial. El director de Obras Municipales, Roberto Zaratiegui, dialogó al respecto con FM Vos (94.5) y con nuestro diario.
Desde hace varios meses que comenzaron los trabajos y los resultados ya son apreciables. “La verdad es que estamos muy contentos, muy ilusionados por el ritmo que tiene la obra, que ya comienza a tomar una forma de lo que va a ser definitivamente. Es grande el cambio que ha tenido un edificio que para nosotros tienen un valor sentimental, cultural, que nos marca un poco porque tiene un gran valor patrimonial (como era la terminal para nosotros)”, dijo Zaratiegui y añadió que “se decidió refuncionalizarla, transformarlo en un edificio moderno, que hoy tiene varias características importantes que van a marcar un poco el desarrollo del microcentro. La obra empieza a tomar forma, ya se puede observar un gran avance porque si bien está en etapas, la parte de locales comerciales ya se puede ver, ya empezó a tomar su fisionomía”.
En esta labor dividida en etapas, la parte de cocheras subterráneas tendrá en breve la losa ejecutada en su totalidad. Según el proyecto previsto, las cocheras estarán capacitadas para albergar a un centenar de vehículos. “Es un punto neurálgico, donde hoy el estacionamiento es realmente un conflicto, y también nos permite tener desde la parte de cocheras subterráneas, todo lo que son servicios, todo lo que es la parte de ascensores, servicio eléctrico, todo lo que requiere el edificio”, aclaró.
En cuanto a lo que son las actuales dársenas de colectivos de media distancia, el funcionario recordó que una de las premisas del proyecto fue mantener “la idiosincrasia de la vieja terminal”, por lo que la calle Coronel Suárez, entre Avellaneda y Godoy Cruz seguirá teniendo su lugar para recoger y dejar pasajeros. Además, habrá un sector de baños públicos y cafetería.
Será una construcción que –sobre el subsuelo– tendrá planta baja y dos niveles, que además de comercios contarán con oficinas administrativas, todo bien diferenciado. Se prevén sobre un ala de ocho a diez locales comerciales, y en la otra ala, seis más. No obstante, la división en módulos permitirá la ampliación o reducción de los espacios de acuerdo a las necesidades.
Una vez concluida la obra, el edificio será concesionado por la comuna mediante licitación pública. “Cada uno de los interesados propondrá una manera, su inversión o tipo de proyectos. En función de eso, la Municipalidad irá eligiendo lo que realmente sea mejor y se adapte a los usos que se han previstos”, adelantó.
Cabe decir que la obra tiene un plazo total estimado de dos años, habiéndose trabajado ya alrededor de seis meses.
