La huerta de un jardín maternal llevará el nombre “Los Ángeles de la Cuesta”

Hoy tendrá lugar el que espera ser un emotivo encuentro, del que participarán los padres de los niños fallecidos en el accidente que tuvo lugar en la Cuesta de los Terneros el 25 de junio de 2017. Será un acto en el que se le colocará el nombre “Los Ángeles de la Cuesta” a una huerta en homenaje a aquellas vidas perdidas. La misma está ubicada en el hogar “Naranjito en Flor” (calle Houssay).
El impactante siniestro vial ocurrió el 25 de junio de 2017 y dejó como saldo 15 víctimas fatales y 38 heridos que viajaban a bordo de un colectivo. Casi todos los pasajeros eran alumnos de entre 5 y 15 años de la escuela de danzas Soul Dance Studio, del partido bonaerense Malvinas Argentinas.
La directora del jardín maternal “Naranjito en Flor”, Adriana Muschela, explicó a FM Vos (94.5) y Diario San Rafael: “Ha sido una cuestión de coincidir con los papás en encontrarnos en esta vida, continuar encontrándonos acá en San Rafael de una manera o de otra. Nosotros trabajamos con niños de 45 días a 3 años en el jardincito y tenemos una huerta educativa. Trabajando con las docentes, con los papás, con las familias, con los niños puntualmente, nos encontramos con una señora que es vecina nuestra del barrio y tiene contacto directo con los ‘angelitos’, y en común acuerdo nosotras como docentes del jardín decidimos ponerle el nombre ‘Los Ángeles de la Cuesta’ a la huerta, para que sigan estando presentes en distintos lugares de San Rafael”. Es que todos consideran que aquellos niños fallecidos de alguna manera forman parte de nuestro departamento.
Tras surgir la idea, la misma les fue transmitida a los padres de los “angelitos”, quienes aceptaron, y Muschela pasó el informe correspondiente al área de Educación de la comuna, obteniendo el mismo apoyo. La directora destacó que las familias han estado más que agradecidas, al saber que en este caso a través de la huerta se les estará dando un homenaje más a sus hijos.
Actualmente el espacio cuenta con una siembra de tomates, lechugas, zanahorias y hierbas aromáticas. “Esta es una huerta que tiene una finalidad educativa, ya que si bien nosotros trabajamos con niños muy chiquitos, nos abocamos a que ellos sepan lo que es la necesidad de cuidar una plantita, de darle amor, de darle agua, protegerla del sol, y cuando llega el momento de la cosecha, esa producción se la llevan a sus hogares para compartir en familia”, aseguró.