La importancia (a veces olvidada) de la ciencia y la medicina

La pandemia de Covid-19 que por estos días azota al mundo ha dejado en claro que el trabajo de científicos y médicos es –como tantos otros– fundamental en las sociedades modernas.
Uno de los ejemplos más claros de ello en nuestro país es el instituto Malbrán, que durante los primeros momentos del virus en Argentina se transformó en el epicentro de los análisis de casos sospechosos y el lugar común de consultas a sus integrantes para conocer más respecto de la patología, que ahora ya es tristemente célebre. De acuerdo a las cifras oficiales, ese mismo centro sanitario sufrió, entre 2015 y 2019, un 50 por ciento de recorte en su presupuesto, un 10 por ciento de bajas en el plantel de recursos humanos, la completa eliminación de presupuesto para la adquisición de equipos, infraestructura y mantenimiento y, como si eso fuera poco, el personal que no fue despedido tuvo que sobrevivir con el 65 por ciento de recorte en sus salarios.
En un país como el nuestro, donde lamentablemente cada tanto –sobre todo cuando las circunstancias no obligan a los gobernantes– el sistema científico y médico recibe el destrato y el olvido de las autoridades, es necesario que la ciudadanía tome conciencia de la importancia que tiene la tarea, muchas veces silenciosa, que realizan investigadores y trabajadores de la ciencia y la salud de todo el país para volver a poner de pie un sistema que sufrió una penosa caída en los últimos años.
Es ese trabajo el que siempre, pero más en momentos como estos, brinda soluciones para los desafíos de la vida cotidiana de la gente. La ciencia, como una de las vías más importantes de acceso al conocimiento, y la medicina, como la implementación práctica de esos conocimientos en pos de cuidar y sanar a los ciudadanos, desempeñan un rol fundamental en las sociedades modernas del cual se beneficia el grueso de la humanidad, ya que aumenta la calidad de vida de la población. Eso no deben olvidarlo los dirigentes cuando la situación no es desesperante como ahora.