La inflación sigue siendo la principal preocupación de la comunidad

En Argentina el gran problema que tiene la mayoría de los ciudadanos es la inflación. Pasan los meses y el Gobierno Nacional no encuentra las herramientas para que bajen los precios, lo que agudiza la crisis y también la angustia de miles de trabajadores que ni siquiera llegan “a mitad de mes”.
En octubre, el índice de precios al consumidor aumentó 6,3% a nivel nacional y alcanzó el 88% interanual.
En Mendoza, la inflación de los últimos 12 meses se acerca al 90%, mientras que en lo que va del año los precios de los diferentes rubros crecieron, en promedio, casi un 79%.
En nuestra provincia, por ejemplo, la ropa aumentó un 122% en el último año, siendo el rubro más afectado por el crecimiento sostenido de precios.
Pero no solo ha sido en indumentaria el aumento, también se siente a la hora de adquirir alimentos, medicamentos, servicios básicos, entre las distintas categorías.
Con esos números, todo sondeo social arroja que la gran inquietud de los ciudadanos pasa por la inflación, que sigue estando por encima de lo que han crecido los salarios, lo que implica un menoscabo del poder adquisitivo de la clase trabajadora.
En medio de ese panorama por de más crítico, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, livianamente sostuvo que hoy “lo importante” es que Argentina gane el Mundial por encima de los dolores de cabeza que causa la inflación. Increíble, pero real.
Con una dirigencia nacional que todas las semanas tropieza con absurdas declaraciones en lugar de trabajar en medidas efectivas contra el principal problema de los argentinos, es muy complicado avanzar en el objetivo que se trazó el ministro de Economía, Sergio Massa, quien días atrás apostó a una inflación del 3% mensual para fines de 2023.