La parroquia Nuestra Señora de los Dolores adquirió una copia del Santo Sudario de Jesús

En la parroquia Nuestra Señora de los Dolores, ubicada en El Chañaral 2699, se entronizó una réplica de la Sábana Santa, también conocida como Sudario de Turín, Santo Sudario o Síndone. Todos esos son los nombres con que se conoce la manta con la que la tradición cristiana indica que se envolvió el cuerpo de Jesús tras su crucifixión y sepultura.
Sobre esta nueva adquisición con la que cuenta ahora este lugar sagrado, el sacerdote Miguel Fuentes, brindó detalles a FM Vos y Diario San Rafael. “Después de casi tres años de trabajo, pudimos bendecir la réplica de la Santa Síndone. Fue el viernes 19 de junio. Se pudo colocar para ser visitada por los fieles en la parroquia. Ya quedó instalada y entronizada en una de las naves del templo y de forma permanente”, comentó.
En relación a la sábana original de Turín, relató que “al menos se conocen tres incendios a los que sobrevivió. Uno fue en el siglo XIII, otro que la dañó en el siglo XVI y uno en los años ’90, pero los bomberos lograron salvarla. Uno de ellos, llamado Trematore, logró salvarla de forma milagrosa, ya que rompió dos vidrios blindados a prueba de bala, pero en la angustia de que si no la sacaban, consiguieron salvarla. Por ello, ahora se conservan con mayores medidas de seguridad”.
En relación a la muerte de Cristo, el religioso explicó que “el evangelio dice que José de Arimatea, un hombre rico, donó esa síndone, que era nueva. Y si bien Cristo murió pobre, se lo sepultó en un sepulcro de ricos, que era propiedad de este hombre que era discípulo secreto de Jesús. También interviene Nicodemo, las mujeres y San Juan, quienes fueron testigos. San Juan es muy importante porque dejó datos en el evangelio”.
Sobre la forma de sepultura utilizada, explicó que “se debe pensar que se trata de un lienzo de 4,40 metros de largo, por 1,13 m de ancho. Entonces es más del doble de un hombre. Al que se lo envuelve. Así se colocó a Jesús en el Sepulcro. A Cristo se lo crucificó un día viernes a las 3 de la tarde, por eso se lo bajó rápido, ya que comenzaba la víspera del sábado, un día sacratísimo para los judíos y previo a Pascua”.
Y agregó que “entonces se lo envolvió en la sábana con la intención de que pasada esa fecha, se iba a volver al tercer día para hacer el lavado del cuerpo y terminar la sepultura. Pero cuando llegan las mujeres, el sepulcro estaba abierto y el cuerpo no se encontraba allí”.
Sobre las visitas a esta réplica en la parroquia, el sacerdote invitó “en principio se puede visitar durante la mañana, mientras haya permiso para moverse, no hay mayor problema. De la Arquidiócesis de Turín, donde hacen las réplicas y custodian la original, se estipula que debe ser para exposición pública”.