Durante 2022, la indumentaria fue uno de los rubros más afectados por la inflación. Creció a un ritmo superior y cerró el año superando la barrera de las tres cifras, llegando a un 132,8% de incremento.
Ese panorama fue el detonante central para que los comerciantes implementaran nuevas estrategias para reactivar las ventas. Una de las metodologías empleadas fue la anticipación de la liquidación, algo que en años anteriores se realizaba durante la época de Vendimia.
“A raíz del Mundial Qatar 2022 las ventas no dieron los frutos que uno esperaba, prácticamente no tuvimos fiestas de fin de año y, por ello, he decidido comenzar a liquidar toda la ropa de verano para poder afrontar la nueva temporada”, comentó Daniela, dueña de Adrenalina, una tienda de indumentaria destinada a la mujer en la Ciudad de Mendoza.
Liquidación anticipada
Terminó la primera quincena de enero y la temporada primavera-verano está llegando a su fin. Algo impensado para la época. Lo cierto es que son varios los comerciantes mendocinos que apelaron a esta estrategia para poder afrontar lo que viene.
“Hemos tenido un año muy complicado, en cuanto a las ventas, y es necesario reactivar para que nuestra única fuente de ingreso siga funcionando”, comentó Daniela, que hace poco trasladó su local a la Ciudad y las cosas no son como imaginaba, pese a que sus clientas siempre están.
La empresaria manifestó que trata de tener mucha mercadería, pero esta vez la situación económica jugó una mala pasada. “Para Navidad y Año Nuevo las ventas estuvieron muy flojas y eso me obligó a levantar la temporada y liquidar”, dijo.
Las prendas tienen un descuento que van del 15% al 30% y sólo se pagan en efectivo. “De ese modo junto plata para poder comprar lo nuevo que no será fácil de adquirir”, agregó la mujer.
Pero las liquidaciones no sólo se encuentran en el rubro indumentaria, sino que el calzado y la marroquinería también han apelado a la misma salida.
“Desde hace dos semanas la empresa decidió lanzar la liquidación de carteras al 50% y la idea es vender todo lo que se había planificado comercializar en diciembre y enero. Las ventas están muy malas y con esto pretendemos recuperar la inversión para comprar más mercadería”, contó Matías, encargado de Umbral.
Y, párrafo seguido, aseguró que “desde que informamos sobre el descuento, el local comenzó a tener compradores y justo coincidió con el arribo de muchos turistas. Nos funcionó y estamos muy conformes con los resultados alcanzados, aunque reconocemos que en un mes recién se tendría que haber hecho”.
El efecto de la inflación golpeó fuerte a todos los comercios por igual, de hecho, una importante zapatería local, instalada desde hace décadas, se plegó a la medida y liquida sus zapatos al 20%.
Otras tiendas, que están en las mismas condiciones, se resisten a anticipar los descuentos y, ante esto, han dispuesto una serie de promociones.
“Algunos aplican el 3×2 o 50% de descuento en la segunda prenda. Hoy todo vale en el comercio y los empresarios se las ingenian para poder subsistir”, admitió Adrián Alin, de la Cámara Empresaria de Comercio, Industria, Turismo y Servicios de la Ciudad de Mendoza (Cecitys).
Pocos cierres, pero existen
Los cierres de comercios existen, pero no de la manera que se dieron durante la pandemia de Covid-19. Hoy los motivos son inflacionarios, sumado a las pocas ventas, entre otros.
Un claro ejemplo es la sucursal central de Terra, una histórica tienda de ropa femenina que, tras 20 años de existencia, en plena calle San Martín de Ciudad Mendoza, decidió cerrar sus puertas.
De acuerdo con lo manifestado por sus dueños, “en 2021 vendimos 200 prendas, mientras que, en 2022, fueron 75 y el alquiler del salón nos aumentó un 50% en un año. No se podía sostener más la situación y decidimos quedarnos con los locales más chicos, uno ubicado en la galería Kolton y el otro en Maipú”.
El empresario, quien solicitó no publicar su nombre, contó que “hoy en el centro existe mucha competencia desleal, sobre todo, en el rubro indumentaria y es muy difícil hacerle frente”.
El proyecto a futuro, una vez que el panorama financiero se lo permita, es instalar un local en las afueras del Gran Mendoza. “Estamos realizando un sondeo de mercado y ver si abrimos un nuevo negocio en San Rafael, San Martín o en las cercanías”, comentó.
Fuente: El Sol
