La situación se ha presentado en los últimos meses con preocupante asiduidad y en varios puntos de nuestra ciudad: personas que arrojan elementos contundentes –generalmente piedras- contra vehículos que van pasando, algunas veces con meras intenciones de dañar y, otras, para hacer detener a esos rodad y perpetrar robos a sus ocupantes.
Este fin de semana no fue la excepción, ya que al menos dos hechos como los referidos fueron denunciados ante la policía. El primero de ellos se produjo en una de las “zonas calientes”: la avenida Rawson hacia el norte. Más precisamente, cerca de la intersección de esa arteria con 12 de Octubre, un utilitario Renault fue objeto de pedradas que rompieron varios de sus vidrios. Frente al hecho, el conductor del vehículo optó por no frenar en el lugar y seguir camino por temor a un robo.
En tanto,la noche del sábado, un colectivo de la empresa Chevallier que viajaba desde nuestra ciudad hacia Buenos Aires también fue apedreado (foto). En este caso, los asociales atacaron al vehículo de transporte público en la avenida Telles Meneses. Tras colocar un cartón en el lugar del vidrio roto (a esa hora no se podía cambiar el cristal), el rodado continuó viaje y pudo arribar a Capital Federal con una hora de retraso.