Nuevas pruebas se incorporaron en las últimas horas a la causa que investiga la muerte de Vicente Sabino Gatica (53), quien recibió tres piedrazos durante un enfrentamiento entre hinchas, en la cancha de Villa Bastías, al final de un partido de la Liga Tupungatina.
De la necropsia surgió que el hombre, conocido como el Negro Cua, no presentaba lesiones de consideración, ya que los proyectiles no le provocaron fracturas óseas ni hematomas internos.
Sin embargo, no se pudo determinar la causa del deceso, por lo que aguardarán por los estudios anatomopatológicos, que suelen tardar varias semanas en producirse.
Con el resultado de los peritajes y la incorporación de testimoniales, el fiscal del Valle de Uco Jorge Quiroga consideró que los autores no tuvieron intención de matar a Gatica, por lo que la causa se investiga como un homicidio culposo agravado por ser cometido en ocasión de un espectáculo deportivo.
Los detectives tienen a tres sospechosos identificados, que son hinchas del Club La Arboleda, institución de la que Gatica era vicepresidente.
Fue uno de los hijos de la víctima quien señaló a los agresores durante la testimonial que se le tomó en sede judicial. El joven aseguró que conoce a los sujetos desde su infancia, ya que todos son vecinos del barrio La Arboleda.
Si bien el representante del Ministerio Público no tomó medidas privativas de la libertad sobre los señalados atacantes, en las próximas horas serían citados para ser imputados.
El hecho
Fue minutos antes de las 19 cuando finalizó el encuentro entre Villa Bastías y La Arboleda, en el que se impusieron estos últimos por 1 a 0, por la quinta fecha de la fase de grupos del campeonato de la Liga Tupungatina.
Cuando los hinchas visitantes se estaban retirando, comenzaron a agredir a piedrazos a la parcialidad local. Allí se produjo un intercambio de proyectiles, en el que intercedió Gatica para calmar los ánimos.
Mientras el hombre regresaba de hablar con los fanáticos de Villa Bastías, varias piedras volaron nuevamente hacia ese lugar y tres le impactaron al dirigente: una en el pecho y dos en la cabeza.
Luego de la agresión, el Negro Cua se desvaneció y uno de sus hijos, que es militar, le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) hasta la llegada de la ambulancia del Servicio de Emergencias Coordinado (SEC).
Posteriormente, fue trasladado al Hospital Las Heras, al que llegó con signos vitales y falleció media hora después.
Fuente: El Sol
