Una noticia sacudió el mundo de los eSports y despertó una gran polémica: un equipo contrató a un niño de 8 años para que juegue Fortnite.
El pequeño Joseph Deen, conocido en el mundo gamer como “33 Gosu” jugará para el “Team 33”. Cobrará u$s33 mil y además recibirá un equipo de gaming de u$s5 mil.
Pesa a que el pequeño Deen fue contratado para jugar al videojuego más popular de Epic Games, muchos se preguntan si este contrato no viola las leyes de trabajo infantil. De hecho, ya hubo problemas cuando H1ghSky1 mintió sobre su edad para jugar para el equipo FaZe Clan.
«Básicamente, no hay leyes laborales, porque no tiene que trabajar. Solo está jugando… Se despierta el sábado por la mañana, o regresa de la escuela a las 5 de la tarde, y está jugando con o sin nosotros. No lo llevaremos a ningún lado. No está participando en torneos. Está jugando como jugaría el sábado o el domingo. Estamos legalmente autorizados a darle dinero porque creemos en él y estamos haciendo una inversión.», explicó el equipo “Team 33” en un comunicado.
Por otro lado, aclararon que el contrato es confidencial y no obliga a Joseph a realizar nada especifico. De hecho, no tendrá sanciones si no se presenta a entrenar y sus padres pueden romperlo si consideran que es perjudicial para su desarrollo.
Además, argumentan que no es un contrato laboral, sino que de compromiso entre ambas partes. Habrá que esperar que actúen expertos legales, quienes creen que el caso será evaluado por un Secretario de Trabajo.