Preocupa el avance delictivo en zonas rurales

Una serie de violentos hechos delictivos en zonas rurales, ha generado preocupación en autoridades policiales, teniendo en cuenta la característica de los mismos.
Bajo el modo “entradera”, como se denomina a los asaltos en vivienda cuando las víctimas se encuentran en su interior, delincuentes siembran pánico a punta de arma y con extrema violencia arremeten contra quienes se encuentran en total estado de vulnerabilidad.
Entre las diversas lecturas que hacen los investigadores en torno a esta problemática, le apuntan al aprovechamiento que hacen los delincuentes de actuar en lugares alejados del centro, donde las medidas de seguridad no son las mismas y eso juega a favor de los ladrones.
En la ciudad, apuntan quienes trabajan en la prevención delictual, el sistema de videovigilancia más la mayor densidad poblacional generan mayores obstáculos a quienes delinquen. En ese sentido, “estudian” propiedades de zonas rurales donde le es menos complejo actuar y luego huir.
Hay una realidad: San Rafael creció significativamente en muchos distritos sin contemplar mayores recursos para proteger esas zonas. Es así que lugares como Las Paredes o Rama Caída, que han tenido una notable evolución poblacional en los últimos años, no disponen de policías ni móviles suficientes para garantizar la seguridad de sus vecinos.
Tras violentos asaltos, entre ellos uno ocurrido en Rama Caída por el que una familia quedó a merced de delincuentes armados, la Policía adopta medidas pero limitadas a su capacidad de acción, lo que también está en conocimiento de los malvivientes que se mueven “más cómodos” en zonas alejadas del centro.