La sanrafaelina Karen Mohamed, quien vive hace 9 años en San Luis, se comunicó con Diario San Rafael y FM Vos (94.5) a fin de difundir su desesperación ante no saber nada sobre el estado de salud de su madre y su padrastro.
Dijo que “vivo aquí (San Luis) junto a mi hermano mayor, que se encuentra en la misma situación que yo con trabajo y familia. La realidad es que una de mis hermanas dio positivo (Covid-19) el 17 de agosto, por lo cual la aislaron en el hospital Schestakow. Desde ahí, el resto de mi familia comenzó a tener síntomas. Es decir, mi madre y mis hermanos, mi padrastro, todos pasaron por diferentes síntomas. Quien más nos preocupaba era mi mamá. Hasta el miércoles o jueves podíamos comunicarnos con ella, estaba con mucho dolor de garganta y en el pecho y ya casi no podía hablar. A todo esto no llegaban a hisoparla ni a controlarla, y a mi hermana la tenían aislada en el hospital”.
Añadió que “el reclamo empezó por ahí, para que entraran a revisarla a mi mamá. Ingresó con un cuadro de neumonía al hospital y con oxígeno. El domingo apenas pudimos tener un contacto porque mi madre pudo recuperar su celular con muy poca carga en el teléfono y supimos que tenía neumonía y nada más. En realidad es un audio que explica en el grupo de la familia”.
En este sentido, dijo que “por eso es mi desesperación, porque uno llama al hospital, y más siendo familiar directo, y no sabemos nada. Hasta este martes por la mañana la respuesta fue: ‘no podemos brindar información’. Estoy a 300 kilómetros y se me puede pasar cualquier cosa por la cabeza. Mi padrastro es persona de riesgo, es diabético y tiene cirrosis. La última respuesta que me dieron fue que llame en la mañana y hable con algún médico, pero yo pido que me digan cómo están, si realizaron y tienen los resultados de Covid, porque sabemos que tienen todos los síntomas, pero nada. Pedimos que nos entiendan como familiares. Sé que por ahí se empieza a divulgar información, pero lo único que pido es que me digan cómo está mi madre y padrastro”.
Añadió que “el resto de mi familia están aislados y no se pueden contactar, ya que son contactos estrechos. Lo que hemos podido saber es por amistades. Te digo que quedaron dos de mis hermanas menores y fue mi hermano a visitar a mi madre el domingo y se tuvo que quedar ahí con ellas, si no estarían solas. Ellas tienen 15 y 10 años”.
Por ello, Mohamed reiteró que “el reclamo es que sean más humanos a la hora de dar información a un familiar directo. Voy a seguir insistiendo hasta que me atienda un médico y me dé la información. Ese es el dolor que tengo, la desesperación que tengo. La única forma en que puedo ayudar es con dinero por ahora a mi familia, pero no sabemos nada. Si viajo a San Rafael debo aislarme y hacer la cuarentena y pagarme los test, que son carísimos, porque salen 6 mil pesos. Ojalá pueda hablar con alguien, y si bien es cierto que no pueden dar información, yo brindo mis datos y que le digan a la paciente para que sepa mi identidad. Ojalá sirva para otra gente que está pasando por una situación similar”, expresó con angustia.
