Sector agrícola en alerta: la apertura de la importación destruirá la industria local porque esos productos llegan subsidiados en origen

La apertura de las importaciones de alimentos que anunció el gobierno de Javier Milei la semana pasada, también incluye la importación de aceitunas y aceites de oliva, aun cuando estos productos no pertenezcan a la Canasta Básica de Alimentos (CBA).
Para Mario Bustos Carra, gerente de la Asociación Olivícola de Mendoza (Asolmen), se trata de una medida injusta. Desde el sector consideran que se podría haber avanzado en un plan que contemple la reducción de impuestos para sostener el empleo y la producción de las pymes.
«La venta al exterior tanto de aceitunas en fresco como de aceite de oliva, aumentó durante el 2023 casi el 150%, porque disminuyó la cosecha en España. Si bien se trata de un dato alentador, hoy la realidad se ve empañada por la problemática de la apertura de las importaciones de los alimentos. En ese sentido, la decisión del gobierno nacional no es clara, ya que supuestamente se dirigía a la importación de productos de Canasta Básica de Alimentos. Ahora bien, el aceite de oliva no forma parte de la CBA. Dentro de este escenario, vemos con mucha preocupación que puede llegar pasar en el futuro», dijo a FM Vos 94.5, Mario Bustos Carra, gerente de la Asociación Olivícola de Mendoza.
«No sabemos bien cuál es el objetivo final de esta resolución, se supone que apunta a bajar los precios del mercado interno. Lo que sucede es que estos productos específicos se rigen por precios internacionales y por ello se deben ajustar a esos valores. Hay que tener en cuenta que España no va a tener todos los años malas cosechas y que está decisión nos perjudica mucho en lo que concierne al mercado interno», amplió.
«Se trata de una política con un sistema discrecional, porque les permite a algunas empresas importar en condiciones que el resto de los importadores no tienen. Esas empresas ‘beneficiadas’ que van a poder importar un producto terminado, listo para consumir, tendrán la facilidad de no pagar el Impuesto País ni la percepción del IVA. Además, podrán cancelar a 30 días. Nos parece que es una medida injusta», criticó Bustos Carra.
Después, remarcó que para mejorar la competitividad es necesario que se bajen los impuestos al sector que produce en el país. «Si se aplica una reducción en los impuestos es mucho más fácil que bajen los productos de la Canasta Básica de Alimentos. Además, con una quita de la carga impositiva se fortalece y estimula a la producción nacional», argumentó.
En esa misma línea, ejemplificó lo que sucede con el precio del aceite de oliva en Argentina. «Una botella de ese producto en España vale hasta un 60 % menos que en Argentina. Esto se debe a que el aceite de oliva es uno de los productos que mayor porcentaje de subsidio tiene en la producción agrícola de la Unión Europea. Con ese tipo de normativas mitigan el bolsillo de los españoles. Acá, por el contrario, rige una carga tributaria pesada que encarece al producto», afirmó el titular de la Asociación Olivícola de Mendoza.
«Algo parecido sucede con los duraznos en latas. En Grecia ese producto es subsidiado, si ingresan van a tener un precio mucho menor. Me parece que para que los precios bajen se pueden buscar otras alternativas», opinó.
«Acá lo que sucedió es que hubo una distorsión en los precios. Muchas empresas apuntaron a un dólar más alto. Evidentemente hubo un error de cálculo. Los precios tienen que bajar. Las empresas tienen que entender que el dólar se acomodó cerca de los mil pesos. Por otra parte, el gobierno debe hacer una revisión de todo el sistema tributario argentino», subrayó.
«En Argentina uno tiene que pagar un impuesto para terminar de cancelar otro. Estamos ante un sistema totalmente extorsivo que se mantiene desde hace años. Para que los precios de los productos bajen, antes que importar es mejor aplicar una reducción sobre los tributos que se pagan para importar tecnología e insumos. Con esto ayudaríamos a las industrias a exportar más y tener un menor precio en el mercado interno. No queremos una política proteccionista, sino que haya una competencia en igualdad de condiciones», reflexionó al final del reportaje el referente de Asolmen.