La Suprema Corte de la Provincia ratificó el procesamiento contra Marcia Villagra, propietaria de la empresa de transporte, y Jorge Pinelli, chofer y padre del conductor fallecido en 2017. Para Rufino Troyano, abogado de familiares de algunas de las víctimas, fue una catástrofe, no un accidente, pues «ellos tenían conocimiento del estado calamitoso del colectivo».
La tragedia de la Cuesta de los Terneros está próxima a cumplir tres años y la Suprema Corte de la provincia ratificó el procesamiento contra Marcia Villagra, propietaria de la empresa de transporte, y Jorge Pinelli, chofer y padre del conductor fallecido en 2017.
Para indagar sobre esta novedad judicial, dialogamos con el abogado de familiares de algunas de las víctimas, Rufino Troyano, quien insiste en que lo que pasó no fue un accidente.
“El juez de instrucción entendió que se debía dar por extinguida la investigación penal porque había fallecido el chófer pero nosotros apelamos y obtuvimos en un fallo ejemplar, la imputación tanto para Villagra como Pinelli. Los defensores de ellos fueron a casación y la Corte ahora falló a favor de mantener la imputación de ambos, para satisfacción de los padres de las víctimas”, expresó en FM Vos (94.5).
Sobre cómo continuará el proceso judicial, el letrado indicó: “En principio, luego de que se radique el expediente en San Rafael, se llamará a indagatoria a estas personas y desde ahí, corresponde pedir la detención de Pinelli porque ya no vive más en el domicilio que había fijado, demostrando no querer comparecer ante la Justicia. El caso de Villagra es diferente, porque al ser empleada pública se la puede ubicar en ese domicilio”.
Garantes de esta tragedia
“Es un delito sumamente grave porque están imputados por la muerte de 15 personas y lesiones graves a otras 21, es una situación grave para ellos. Entendemos que hay responsabilidad por la garantía, ellos no podían ignorar el estado en el que se encontraba el colectivo ni que viajaban con documentación espuria obtenida por una empresa llamada Control Automotores Buenos Aires S.A, donde conseguimos, junto con la abogada Spagnolo, la imputación de los empleados que conformaban el staff de la compañía; es un expediente que tramita en Morón”, sentenció Troyano.
“Yo lo denomino catástrofe porque no fue un accidente, ellos tenían conocimiento del estado calamitoso del colectivo, incluso transformaron el colectivo en un modelo 2005 cuando en realidad es 2003 y se pudo comprobar la velocidad a la que iba, lo que hizo imposible frenarlo”, añadió el abogado.
