El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) detalló que se cumplieron los criterios de desempeño cuantitativo hasta fines de diciembre, respaldados por una implementación más firme de la política macroeconómica en el segundo semestre de 2022. Estas apreciaciones se vieron publicadas en el informe de la cuarta revisión del acuerdo en el marco del Servicio Ampliado para Argentina.
El resultado de la revisión decantó en el desembolso inmediato de US$ 5.400 millones, por lo que los apoyos del acuerdo SAF de Argentina ya llegan a una cifra cercana a los US$ 28.900 millones en el último año.
El FMI explica en el informe: «En el contexto de una sequía cada vez más severa, una inflación creciente y una cobertura de reservas débil, es necesario un paquete de políticas más fuerte para salvaguardar la estabilidad, abordar los reveses y asegurar los objetivos del programa. Junto con esta decisión, también se aprobó una modificación de la meta de reservas».
Sergio Massa junto a Gita Gopinath, Subdirectora Gerenta del Fondo Monetario Internacional (FMI). Foto: Prensa.
«El Directorio también aprobó dispensas de incumplimiento asociadas con la introducción de medidas de políticas que dieron lugar a nuevas restricciones cambiarias y prácticas de moneda múltiples», suman en el informe publicado el sábado.
La subdirectora gerenta Gita Gopinath, quien se reunió con el ministro de Economía Sergio Massa, detalló que «políticas macroeconómicas más prudentes en la segunda mitad de 2022 respaldaron una moderación de la inflación y mejoras en los saldos fiscal y externo, lo que ayudó a asegurar las metas del programa para fines de 2022».
«Alcanzar el objetivo de déficit fiscal primario de 1,9% del PIB para 2023 sigue siendo esencial para respaldar la desinflación y la acumulación de reservas, aliviar las presiones financieras y fortalecer la sostenibilidad de la deuda», continuó Gopinath.
Con respecto a la energía, aclaró que «será fundamental garantizar que las tarifas de energía para usuarios residenciales y comerciales de altos ingresos avancen para alinearse completamente con los costos, incluyendo para reducir la regresividad del sistema». La subdirectora gerenta del FMI también comentó que «el costo fiscal de la nueva moratoria de pensiones debe mitigarse a través de regulaciones estrictas para apuntar la entrada solo a aquellos con mayor necesidad».
Reunión de Sergio Massa con dirigentes del FMI. Foto: Télam.
«Las tasas de interés reales deberían permanecer lo suficientemente positivas para hacer frente a la alta inflación y respaldar la demanda de activos en pesos. Es posible que se justifiquen aumentos adicionales de las tasas en caso de que se produzcan nuevos shocks inflacionarios o se intensifiquen las presiones cambiarias», explicó Gopinath.
«La tasa de crawl debería continuar apoyando la competitividad, con acciones recientes para racionalizar el régimen cambiario y agilizar las exportaciones que también ayudan a respaldar la acumulación de reservas», sostuvo.
Para la subdirectora gerenta, es clave que «a medida que las condiciones lo permitan y se aborden los desequilibrios, las medidas de gestión de flujos de capital, las prácticas de moneda múltiple y las restricciones cambiarias también deberían eliminarse, ya que no sustituyen a una política macroeconómica sólida».
Además, Ginopath marcó que «las intervenciones del banco central en los mercados secundarios de bonos deberían limitarse a abordar los riesgos de estabilidad financiera». Asimismo, incitó a «movilizar el apoyo de socios multilaterales y bilaterales, incluida la finalización de acuerdos técnicos con los restantes acreedores del Club de París» ya que «es esencial para garantizar que se cumplan los compromisos financieros y fortalecer la cobertura de reservas».
Fuente: Diario 26
