El sector hotelero fue uno de los principales afectados en los momentos más estrictos de la cuarentena en Argentina: durante meses, estuvieron completamente paralizados. A un año desde el primer mes, la ocupación hotelera en Mendoza apenas superó el 25%.
El dato se desprende de la Encuesta de Ocupación Hotelera de abril de 2021, realizada por el Instituto de Estadísticas y Censos (Indec). En ese mes, en los establecimientos de Ciudad se hospedaron 18.634 viajeros, un 99% de ellos residentes argentinos.
La cifra se registró, además, en Semana Santa, una de las fechas más movilizadoras del turismo local, pero que no logró «mover la aguja» en las camas ocupadas.
Si bien el negocio de la hotelería tiene una naturaleza estacional, ya que debe compararse entre períodos con las mismas características, la diferencia entre marzo y abril muestra una caída en la cantidad de huéspedes, a pesar del fin de semana largo con el que comenzó el cuarto mes del año, en el cual se registraron 47 mil pernoctaciones.
En marzo, mientras tanto, hubo una tasa de ocupación del 30,8% en las habitaciones, con 25.434 viajeros hospedados y 66 mil pernoctaciones.
«Destino seguro», la apuesta de los hoteles
Desde la Asociación de Hoteles de Turismo (AHT) señalaron que no existe algún factor que permita planificar cuándo mejorarán los números. De hecho, la Copa América era una esperanza que se terminó disipando al conocerse que Argentina no sería sede del torneo.
Ariel Pérez, gerente del hotel Sheraton, explicó que, debido a la imprevisibilidad de los cambios, se había avanzado en «cartas de intención» para celebrar el evento, sin el cual se calcula que los establecimientos de 4 y 5 estrellas perdieron 150 millones de pesos.
«Queríamos avanzar con contratos, pero nadie aceptaba tomar un compromiso sin saber lo que podía pasar. Al final, no se pudo», indicó.
Frente a este panorama, la apuesta de los hoteles está en que la provincia pueda posicionarse como un destino seguro. Santiago Alsina, gerente del Diplomatic y presidente de la AHT, destacó que el sector no es un problema en la etapa actual de la pandemia.
«Está probado que el turismo no contagia. Algunas personas no quieren la actividad, pero tenemos el personal vacunado, protocolos e infraestructura hospitalaria. Estamos bien preparados», apuntó, destacando que la mayoría de las actividades en Mendoza se realizan al aire libre.
Fuente: El Sol
