SECCIONES
  • Nadie debería creerse perfecto, ni preocuparse demasiado por el hecho de no serlo. | Bertrand Russell

viernes 19, de abril , 2024

Un argentino padece la misma enfermedad que Justin Bieber hace 12 años

La enfermedad es causada por la bacteria borrelia burgdorferi (B burgdorferi) y se contrae por la picadura de una garrapata. No todas las especies de dicho arácnido portan la bacteria: solo aquellas denominadas ninfas que se alimentan de pequeños roedores, en estos casos infectados con B burgdorferi.

David Ostrovsky, argentino de 37 años, contrajo la enfermedad de Lyme en agosto de 2008 durante un viaje a Nueva Jersey.

«Todos los días salía a correr por las plazas. Me pasaba horas recorriéndolas. Como cualquier turista. Muchas veces me habré sentado en el pasto sin problemas. Parecía que me la estaba buscando», contó David.

Al principio muchos observan una erupción en la piel. La lesión es circular y tiene la particularidad de presentarse con un anillo de color claro alrededor de la picadura. La bacteria empieza a esparcirse por el cuerpo y afecta a la piel, el corazón y al sistema nervioso.

Los primeros síntomas suelen ser el cansancio, malestar general, dolores musculares y articulares y fiebre. Pero muchos de estos son ignorados por los médicos y los terminan asociando con otros malestares. Eso mismo le pasó a David. De un día para el otro, empezó a sentirse cansado. Recuerda que esa primera noche durmió diez horas de corrido y cuando se levantó no podía moverse de la cama y tenía un sarpullido por todo el cuerpo.

David volvió a la Argentina y siguió estudiando Sistemas en la sede de Belgrano de la ORT. Continuaba con su trabajo en Kimberly-Clark, yendo al gimnasio y viéndose con amigos. «Al volver de ese viaje mi cansancio era desgarrador. Me quedaba dormido en el trabajo y tampoco podía estudiar», cuenta. Así se sintió durante meses. Pero las primeras visitas al médico fueron una pérdida de tiempo. Le dijeron que estaba anémico, otras veces que podía llegar a tener una infección en la sangre. Pero nada más.

Cuando supo que padecía de Lyne, recorrió diferentes hospitales de Buenos Aires, en busca de un tratamiento, pero nada resultaba efectivo. Hasta que decidió tratarse en un hospital de Dallas, especializado en enfermedades como estas. Así que se mudó allí pro un tiempo.

Hoy vive a 40 minutos del centro de Dallas y va solo tres días por semana a rehabilitación. Solo toma medicamentos, ya no tiene que inyectarse, y la única secuela que sigue teniendo, pero que va mejorando, es el habla. Sin embargo, no es un problema para él: nota que mejora cada día un poco más.

Por ahora no tiene planes de volver a la Argentina. Su objetivo está en poder seguir el tratamiento y curarse por completo.

 

Fuente: La Nación.

A.S

Download PDF

Click para descargar o imprimir la nota

La información justa siempre con vos!

MÁS LEÍDAS

MÁS LEÍDAS

Noticias Relacionadas

¡Bienvenido de nuevo!

Inicie sesión en su cuenta a continuación

Recupera tu contraseña

Ingrese su nombre de usuario o dirección de correo electrónico para restablecer su contraseña.

Agregar nueva lista de reproducción