Un guía instructor de rafting dio su opinión sobre el vuelco de balsas en Valle Grande

En horas de la tarde de este domingo, una de las embarcaciones de rafting se atascó en el cauce del río Atuel, provocando que otras que venían detrás chocasen entre sí. El hecho ocurrió en una curva del cauce del río, debido a la poca erogación actual de agua por el almacenamiento para riego. Algunos de los turistas que visitaban San Rafael cayeron al agua y las imágenes se viralizaron. Al respecto, Héctor Vargas, guía instructor de rafting que estuvo en el momento de los hechos, expuso su versión en FM Vos (94.5) y Diario San Rafael que “llevo 5 años trabajando fuera del país con cursos internacionales que he realizado y están certificados. En Valle Grande hay guías capacitados a nivel mundial y podemos demostrarlo. La gente que sacó fotos e hizo videos, lo presenta como caos y el fin del mundo, pero esto pasa en todos los ríos del mundo. Lamentablemente es una cuestión con Irrigación, nos agarra de chiste, no le interesa el turismo, pareciera, sobre todo por la cantidad de personas que trabajan de esta actividad. Somos 400 instructores, 40 choferes, las vendedoras que son unas 100 y una cantidad de gente que dependemos de esta actividad. Nos cortan el agua y nos quedamos sin trabajo”, comentó ofuscado.
En cuanto a los hechos, sostuvo que “luego de las lluvias, cortaron el agua y deciden largar 11 metros cúbicos. Nos dicen de Irrigación que largarían el agua a las 11 de la mañana porque tendríamos 4 horas de agua, pero lo largaron una hora y media después. Calculábamos hacer 4 o 5 bajadas en el día, pero esto no se pudo y se juntaron todas las empresas, que son 33. Es entendible que todas las balsas entraran al mismo tiempo, pero esto sucedió al principio, y luego se normalizó, no hubo más problema”.
Explicó que “no debimos haber largado todas las empresas a la vez y tendríamos que haber esperado a que se llenara el río más. Eso fue a la altura del Santuario de la Virgen y se dio que una balsa se atoró y luego las otras también, pero no fue más que eso. El error fue ese, el de largar todos a la misma vez y sucedió esto. Creo que no solo era ansiedad de comenzar, sino que teníamos a cientos de turistas ya listos para bajar y esperamos mucho tiempo porque, como vuelvo a repetir, el río se largaría en una hora y fue mucho más tarde”.
Para finalizar, el guía comentó que “lo que debemos entender es que estas cosas perjudican al turismo en San Rafael, porque muchos piensan que no es una actividad segura, o que las empresas no son serias o que no hay profesionales, y sucede todo lo contrario. Con este tipo de imágenes y con opiniones que no tienen ningún fundamento sobre lo que sucedió, solo se perjudica a nuestro San Rafael y a las cientos de familias que viven del turismo”.