Durante casi seis horas, el juez federal Walter Bento retomó su defensa ante el Consejo de la Magistratura por las graves acusaciones que pesan en su contra. La primera audiencia se realizó el pasado viernes y este miércoles el magistrado continuó con su alegato.
Según establece el reglamento de la Comisión de Acusación -en su artículo 22- una vez cumplido el descargo o agotada la instancia para hacerlo, el consejero tendrá un plazo de 20 días para elaborar un proyecto de dictamen para proponer al Plenario del Consejo: desestimar la denuncia, imponer una sanción disciplinaria o, bien, abrir el procedimiento de remoción ante el Jurado de Enjuiciamiento. En caso de considerarlo, deberán ordenar la suspensión del magistrado y designar los encargados de llevar el caso ante el Jury.
Ese dictamen deberá pronunciarse sobre cada uno de los cargos y acompañar los anexos con todos los antecedentes.
Por otra parte, el artículo 23 establece que en caso de que a un juez denunciado se le acepte la renuncia al cargo, “declarará abstractas las actuaciones” y recomendará su archivo.
De todos modos, probablemente, la decisión final quede en manos de la nueva conformación del Consejo de la Magistratura.
El juez electoral está procesado por liderar una banda que cobraba coimas a cambio de beneficios judiciales, por enriquecimiento ilícito, lavado de activos de origen delictivo, cohecho pasivo, prevaricato, abuso de autoridad, desobediencia a una orden emanada de autoridad judicial, ocultamiento de una objeto destinado a servir como prueba y por falsedad ideológica.
La defensa
A minutos de comenzar la alocución, el abogado defensor Mariano Cúneo Libarona solicitó una tercera audiencia. Sin embargo, el presidente de la Comisión de Acusación, Pablo Tonelli, se la negó, aunque le otorgó dos horas más después de las 13.
“Las cuatro horas de la semana pasada, más las cuatro horas de hoy, son suficientes. No hay tribunal que permita que hablen eternamente, el límite de ocho horas es más que suficiente”, sostuvo el presidente de la Comisión de Acusación.
En torno a esto, el juez con competencia electoral les pidió a los presentes que se “pongan en su lugar”. “Es la única chance que tengo de defenderme”, insistió.
Durante su descargo, Bento no hizo otra cosa que declararse “inocente” de todos los cargos que se lo acusan y se mostró como víctima de una “confabulación política, mediática y judicial”.
“Política, porque los colores de la provincia no son los mismos que a nivel nacional, mediática, porque es la pata necesaria para que la infamia tuviera difusión, y judicial, porque hay gente que tiene un odio patológico conmigo”, insistió el juez.
A través de varias filminas, el magistrado enumeró cada uno de los casos por los que se lo incrimina y ensayó su defensa con la ayuda de su abogado defensor, que en algunos momentos interrumpía para preguntarle algunas cuestiones relacionadas con su descargo.
“No incurrí en ningún tipo de conducta interesada en recibir dinero u otros bienes a cambio de resoluciones judiciales favorables. No soy ni jefe, ni organizador, ni miembro de ninguna asociación ilícita, ni siquiera pertenezco a alguna asociación lícita, ni experimenté crecimiento patrimonial”, argumentó el magistrado.
Para Bento, se trata de una causa que se armó “fundamentalmente” por motivos políticos.
Y agregó: “Todavía hay gente que cree que los jueces electorales podemos modificar el resultado de una elección, una utopía. Por ese motivo político se llevó adelante esta causa, la construcción arquitectónica de una infamia que se lleva por delante todos los derechos fundamentales con la única finalidad del encarcelamiento de un juez de la Nación”.
Al final de su relato, Bento se quebró y apeló a la emoción al justificar sus viajes a Miami por un problema de salud de su hijo.
“Durante algún tiempo imaginamos que en Estados Unidos podía existir alguna alternativa de operación, células madres o rehabilitación para uno de mis hijos. Alguno de los viajes fueron con esa finalidad. Mi hijo, su lugar en el mundo, es Disney y por eso la mayor cantidad de esos viajes lo hicimos a ese destino, con dinero proveniente de nuestros ingresos”, concluyó.
Al final de su descargo, Bento destacó: “Soy una persona honesta y esto es una infamia que se ha llevado contra mi familia y contra mí con fines políticos y personales”, finalizó. Sin embargo, el juez no pudo responder la consulta de Tonelli sobre quién está detrás de esa supuesta «confabulación» en su contra.
Fuente: El sol
