El fiscal Javier Giaroli, encargado de la investigación de la desaparición y probable homicidio de la enfermera jubilada Silvia Zulema Chávez (73), ordenó ayer la realización de al menos tres rastrillajes en inmuebles de Cuadro Nacional y Pueblo Diamante, respectivamente, en la búsqueda de lo que podrían ser los restos de la mujer, a la que se presume fallecida de forma violenta. Los operativos no arrojaron resultado positivo.
El primero de los registros se montó, en horas de la mañana del viernes, en una finca de la calle Rivadavia del distrito de Cuadro Nacional. Hasta allí llegó Giaroli acompañado por casi 30 personas entre personal policial, bomberos, peritos y hasta una antropóloga que ha sido convocada para la búsqueda de restos humanos. La decisión de la fiscalía tuvo que ver, en este caso, con que el único detenido que tiene la causa, Mauricio Albornoz, en 2019 escondió allí una camioneta que había robado. En el lugar, los funcionarios trabajaron por un par de horas, pero no encontraron elementos de trascendencia para la causa.
Ya en horas del mediodía, la comitiva se desplazó hasta la ex fábrica “Valle de Oro”, ubicada en la intersección de las calles Pichincha y Ortiz de Rosas, donde los especialistas también realizaron diferentes búsquedas en pos de dar con algún indicio de la presencia del cuerpo de la mujer desaparecida. Perros de la Policía estuvieron en lugar –habitualmente sindicado como “aguantadero” de delincuentes y lugar de descarte de elementos relacionados con el mundo del hampa- pero no marcaron ningún sitio como sospechoso. En un momento determinado, personal policial descubrió una bolsa con restos óseos, pero los peritos concluyeron rápidamente que los mismos pertenecían a un animal y no a un ser humano.
Finalmente, los protagonistas de la búsqueda se desplazaron hasta la calle Bolívar y revisaron otro inmueble que existe en la zona, donde años atrás existió una fábrica de vidrio. El equipo investigativo desarrolló también allí tareas de búsqueda de algún elemento interesante para la causa, aunque –también- sin resultado positivo.
Así las cosas, el misterio de la desaparición de Silvia Zulema Chávez sigue sumando capítulos. Los investigadores, que trabajan sobre la teoría de la “muerte criminal” de la septuagenaria, no descartan –sin embargo- ninguna hipótesis y sus opiniones son contestes en estimar que el eventual hallazgo del cuerpo de la mujer sería fundamental para resolver el caso. En ese sentido, es muy probable que los registros y rastrillajes continúen en los próximos días.
