La falta de competitividad provocada por las bajas en la comercialización del mercado interno y las exportaciones generan preocupación en la industria bodeguera. A esta problemática se le debe sumar que las contingencias climáticas provocaron una gran pérdida en los volúmenes cosechados. Daniel Rada, director del Observatorio Vitivinícola Argentino, en diálogo con FM Vos 94.5 aseguró que hasta el momento el balance de esta temporada no es el mejor.
«Todavía tenemos por delante algunas semanas de cosechas, pero hasta la fecha de hoy y según los últimos reportes, estamos un 11 % por debajo de lo que se venía cosechando el año pasado. El pronóstico final es de un 21 % de merma. Se estiman unos 1530 millones de kilos de cosecha, frente a los 1900 millones de kilos del 2022», precisó Daniel Rada.
«En cuanto a la calidad de las uvas, se dice que serán mejores que la del año pasado. Lo importante es que con este volumen se logren satisfacer todas las demandas del mercado interno y externo», agregó.
Por otra parte, comentó cómo influyen todas estas cuestiones en el precio final del vino. «Esto ya lo hemos vivido antes. Los aumentos en los contratos de compra y venta de uva se trasladan al mercado. En el mes de junio con las nuevas partidas de vinos vamos a tener más precisiones en relación a los precios para el resto de la temporada. Hasta acá, estamos observando un precio mayor si se lo compara con el año anterior. Todo esto se combina con la inflación y el tipo de cambio del dólar. Por esta cuestión, las exportaciones se han retraído en cuanto a su volumen. También el mercado interno se ve muy afectado con un impacto en las góndolas que repercute en el consumidor final», describió el director del Observatorio Vitivinícola Argentino.
«Con el dólar agro se puede descomprimir un poco la exportación, pero hay que pensar que el 75 por ciento de las uvas destinadas a vino se venden en el mercado interno. Hay que ver lo que puede pasar internamente, con el dólar a otro tipo de cambio solo se resuelve parcialmente el volumen exportador. En lo que respecta al mercado interno observo que puede ser más complicado, más aún si se insiste con que el vino entra en lo que se define como ‘Precios Cuidados’. Eso le pone un techo financiero a las bodegas», resaltó.
«Que te permitan aumentar solo un 3 por ciento, realmente es muy poco con las tasas de inflación que hay. Esto es grave y el panorama es bastante complicado. Esta baja en la cosecha va a acompañada de la merma en la comercialización. Lamentablemente hay una disminución en todos los mercados, el interno y las exportaciones», cerró.
