Al referirse a la actualidad de la industria cárnica, Edgardo Fretes, secretario de la Cámara de Industriales Abastecedores de Carne de Mendoza, aseguró que en los últimos dos años el promedio del consumo per cápita de carne cayó 8 kilos.
“A uno le gustaría poder decir que Argentina o quienes nos gobiernan hacen las cosas bien pero lamentablemente no es así, hay funcionarios que realmente hacen mal las cosas porque no saben o están intoxicados ideológicamente”, expresó a FM Vos (94.5).
“Desde el punto de vista de los empresarios de la carne, como lo soy, me conviene que se restrinjan las exportaciones porque yo trabajo con el mercado interno, pero al país, medidas como estas le hacen muy mal, no solo dejan de entrar 125 millones de dólares por mes a la Argentina sino que se caen puestos de trabajo y mercados, como por ejemplo, China, donde estábamos empezando a trabajar”, agregó.
Fretes, por otro lado, indicó las cualidades alimenticias que tiene la carne y que por eso preocupa la baja en el consumo. “Hay países que están intentando subir el consumo de carne porque se dan cuenta de los nutrientes que tiene. La carne ayuda a la sociedad en su rendimiento, acá de la clase media para abajo, que es el 50 por ciento, nos encontraremos con gente que no tiene los nutrientes necesarios para su desarrollo, en especial los niños”, puntualizó.
El plan ganadero
Sobre el plan ganadero que busca implementar el Gobierno nacional, el dirigente afirmó que “si se pensara al revés, la cosa tendría un mayor éxito, si estos 125 millones de dólares que dejan de entrar al país se repartieran como incentivo a la producción local, haría que muchos no abandonen la ganadería y por ende, se produzcan más cabezas y mayor cantidad de carne; las exportaciones no están cerradas pero tampoco se entregan permisos para exportar, es un engaño del Gobierno”.
Fretes se refirió a los costos para sostener una empresa agropecuaria en el país. “El que lo hace y lo hace a conciencia, con responsabilidad, lo puede contar pero vemos que el Gobierno no tiene norte en cuanto a estas políticas; la cantidad de kilos de disponibles no hacen que los precios puedan atenuar el mercado, en la cadena de distribución de la carne, un 20 o 25 por ciento va a los supermercados y el resto a carnicerías”, cerró.
