Los semáforos del kilómetro cero eran un verdadero problema para los automovilistas y peatones debido a contantes fallas en su funcionamiento. Sólo en algunos momentos del día había personal policial dirigiendo el tránsito pero en otros la circulación era complicada. Al parecer, la falta se debía a la falta de sincronización.
Personal del club HIDYN (Hidroeléctrica Diamante y Nihuil) llevaba a cabo un operativo de limpieza en el lago Los Reyunos, del que se recolectaban gran cantidad de bolsas con todo tipo de residuos.
Cada vez estaba más cerca la finalización de la nueva terminal de ómnibus ya que sus obras complementarias se encontraban en su etapa final.