En un allanamiento de una vivienda del Barrio El Molino, efectivos de la Unidad Investigativa detenían a un hombre de 25 años sospechoso de balear de cinco tiros, a un joven de 18 años en la vereda de su casa en calle Ángel Diez Martín cuando se encontraba con un amigo de 32 años bebiendo cerveza y, eran sorprendidos por dos individuos que comenzaban a golpearlos sin motivo alguno. El detenido tenía un frondoso prontuario delictivo y hacía poco tiempo había salido en libertad de la penitenciaria de San Rafael.
Con el fin de garantizar la seguridad en los boliches bailables en la ciudad y distritos, inspeccionan y clausuraban algunos locales de diversión nocturna por no cumplir con los requisitos establecidos.