El fiscal Alejandro Iturbide pidió 25 años de cárcel para la monja Kumiko Kosaka tras finalizar sus alegatos en la causa por los abusos sexuales cometidos en el Instituto Antonio Próvolo.
A su vez, el ex fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, quien pasó a ser jefe de Delitos Económicos desde mayo, solicitó al Tribunal 10 años de inhabilitación especial máxima para ejercer cargos educativos y de albergue donde haya menores y donde se requiera el control de la autoridad pública.
La religiosa está acusada de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por un hecho, partícipe necesario de abuso sexual gravemente ultrajante agravado continuado, participe necesaria en tres hechos de abuso sexual con acceso carnal agravados y autora de cinco hechos de corrupción de menores.
Fuente: El Sol