La naturaleza reclama…

El 18 de octubre se celebra en todo el mundo el Día Mundial de Protección de la Naturaleza, con el objetivo de crear conciencia en la población sobre la necesidad de cuidar el planeta. Esta conmemoración se lleva adelante desde el año 1972, año en el cual el expresidente argentino Juan Domingo Perón pronunciara en un discurso en Madrid las siguientes palabras: «Ha llegado la hora en que todos los pueblos y gobiernos del mundo cobren conciencia de la marcha suicida que la humanidad ha emprendido a través de la contaminación del medio ambiente y la biosfera, la dilapidación de los recursos naturales, el crecimiento sin freno de la población y la sobreestimación de la tecnología. Es necesario revertir de inmediato la dirección de esa marcha, a través de una acción mancomunada internacional».
Estas palabras llegaron a Kurt Waldheim, entonces secretario de la ONU, por medio de una carta que envió el mismo Perón, y se hizo eco de las mismas, logrando que la protección del medio ambiente fuera uno de los objetivos principales de la Agenda 2030.
El año pasado, y ante el esparcimiento de la pandemia de Covid-19, un informe de Naciones Unidas recordó que los ecosistemas saludables ayudan a proteger a la humanidad de las enfermedades porque la diversidad de especies hace más difícil la propagación de patógenos. Por eso planteó que hay que trabajar con la naturaleza y no en contra de ella. El documento hizo un fuerte llamado a redoblar los esfuerzos en todos los países para detener el cambio climático y poner un freno a la alarmante pérdida de biodiversidad.
Cada vez más bosques se están deforestando para cultivar materias primas altamente demandadas por el mercado global, como la soja, el aceite de palma, la pasta de papel o el caucho. Además, la caza, la alimentación y el tráfico internacional de fauna silvestre también plantean un riesgo considerable de transmisión de patógenos entre especies. Asimismo, las altas densidades de población y al comercio internacional contribuyen a que los efectos de la transmisión de enfermedades puedan extenderse rápidamente por todos los rincones del planeta.
Es de esperar que esta vez se comprenda el mensaje de la naturaleza.