Juliana Barraza, proclamada el 11 de octubre, transita con entusiasmo y compromiso sus primeras actividades vendimiales, respaldada por su formación técnica, el acompañamiento de su comunidad y un fuerte proyecto personal ligado al estudio y la vocación.
La Vendimia comienza a palpitarse en cada distrito y Cuadro Nacional no es la excepción. Desde el mes de octubre, la comunidad cuenta con su representante vendimial, Juliana Barraza, una joven de 19 años que asumió el rol tras ser proclamada en una fiesta que reunió a vecinos y vecinas en la cancha del distrito. A partir de allí, inició un recorrido intenso, cargado de actividades, emociones y aprendizajes, que hoy vive con entusiasmo y profundo agradecimiento hacia su gente.
Juliana fue proclamada el 11 de octubre en una celebración denominada “Entre Racimos y Recuerdos”, un evento que, según recordó, tuvo una gran respuesta del público. “Tuvimos una fiesta muy bonita”, expresó a Diario San Rafael y FM Vos 94.5 en su visita a los estudios, al rememorar aquella noche que marcó un antes y un después en su vida. La joven es oriunda de Cuadro Nacional, más precisamente de la zona de Cuadro Bombal.
El camino hacia la proclamación no fue algo que ella hubiera planeado. Según contó, la propuesta surgió desde un grupo de vecinos que acercó la idea al delegado distrital. “No estaba en mis ideas, sinceramente, no voy a mentir”, reconoció. La iniciativa llegó luego a través de la secretaria del delegado y, tras dialogarlo con su familia, aceptó el desafío. “Imagínense qué privilegio. En el momento fue hablar con mi familia y para decir un sí, fue muy bonito”, relató.
Con el correr de las semanas y el inicio de las actividades vendimiales, Juliana confirmó que la decisión fue acertada. “No me arrepiento absolutamente nada”, aseguró, y agregó que está viviendo esta experiencia de manera muy cercana a su comunidad. “Lo estoy viviendo muy lindo, muy ligada a mi gente”, señaló, destacando el acompañamiento permanente que recibe.
Además de su rol como representante, Juliana cuenta con una sólida formación académica. Es técnica agropecuaria, egresada de la escuela Martín Güemes de La Llave, una institución reconocida por su intensa actividad educativa y productiva. “Tiene muchísima actividad, la verdad que tiene un montón tanto de productos como de actividades. Se aprende muchísimo”, afirmó. En ese sentido, destacó que la formación no se limita a lo teórico.
La joven también remarcó la importancia de los proyectos desarrollados durante su etapa escolar, los cuales hoy le resultan de gran utilidad en el proceso de capacitación vendimial. “Desarrollamos un proyecto a fin de año y hoy saber hacerlo me ayudó un montón. Presentar un proyecto en Vendimia es hacer tal cual el que yo hice en la escuela”, explicó, convencida de que esa base le da una ventaja. “Me considero que estoy preparada”, afirmó con seguridad.
En cuanto a la proclamación, Juliana recordó que fue un momento atravesado por sensaciones intensas. “Fue una sensación muy bonita”, dijo, aunque admitió que también hubo nervios y algo de temor. “Era una mezcla de nervios, pero era como un poquito de miedo, porque la gente no me conocía”, confesó. Sin embargo, el resultado fue más que positivo. “La verdad que agradezco muchísimo, porque el amor que me brindaron fue increíble”, expresó emocionada.
Desde su elección, ha participado activamente en otras fiestas distritales. “Fui a todas, o casi todas”, contó, señalando que sólo faltó a una. De cara a los eventos centrales, como la Vía Blanca y el acto principal en el teatro griego Chacho Santa Cruz, Juliana prefiere vivir el proceso paso a paso. “Estoy como disfrutando el momento, las actividades de ahora”, explicó, haciendo referencia también a su participación en acciones comunitarias como las visitas junto a Papá Noel en el distrito. “Son cosas muy bonitas que yo creo que no voy a vivir nunca más”, reflexionó.
Pensando en el futuro, Juliana tiene claro que su camino seguirá ligado al estudio. “La verdad que quiero estudiar”, aseguró, y confirmó su deseo de formarse como veterinaria, una vocación que la acompaña desde muy pequeña. “Desde muy chiquita la verdad que lo sueño. No ha cambiado nunca mi decisión”, afirmó. En ese recorrido recordó también el esfuerzo que implicó cursar la secundaria, viajando durante 6 años desde Cuadro Nacional hasta La Llave.
Con los pies en la tierra y la mirada puesta en disfrutar cada momento, Juliana resume su experiencia con una frase que refleja su forma de transitar este camino. “Más allá de los resultados hay que disfrutar”, sostuvo, agradecida por la oportunidad y el respaldo recibido. Al despedirse, no dudó en enviar un saludo especial a su comunidad, reafirmando el fuerte lazo que la une a Cuadro Nacional.
