Los adultos mayores y una realidad invisibilizada

Una de las características que tiene el tristemente célebre coronavirus Covid-19 es que no discrimina entre sus víctimas. Todos los seres humanos somos pasibles a contraerlo. No obstante, las estadísticas indican que los mayores de 80 años mueren a un ritmo cinco veces mayor que el resto de las franjas etarias. La discriminación de los adultos mayores no es un hecho novedoso, pero la pandemia vino a poner en evidencia que en una gran parte del mundo esas generaciones no tienen acceso a los servicios de salud esenciales.
“Ninguna persona, joven o vieja, es prescindible”, dijo hace poco el secretario general de la ONU, António Guterres, en un mensaje a la comunidad internacional, tras señalar que los servicios de atención a largo plazo para las personas mayores deben reconocer y enfrentar los desafíos particulares a los que se ven expuestos, incluida su capacidad para acceder a tratamiento y atención médica. “Las personas de edad tienen los mismos derechos a la vida y a la salud que todos las demás”, subrayó el titular de la ONU, y recordó que al adoptar decisiones difíciles respecto a la atención médica para salvar vidas en el actual contexto de crisis sanitaria, se deben respetar los derechos humanos y la dignidad de todos.
Según la ONU, el envejecimiento de la población está a punto de convertirse en una de las transformaciones sociales más significativas del siglo XXI, con consecuencias para casi todos los sectores de la sociedad, entre ellos, el mercado laboral y financiero y la demanda de bienes y servicios de viviendas, transportes y protección social, entre otros, así como para la estructura familiar y los lazos intergeneracionales. En otras palabras, el mundo ha iniciado un lento pero sostenido proceso de envejecimiento que plantea fuertes desafíos para las políticas públicas.
No obstante, y casi paradójicamente, el maltrato de las personas mayores es un problema social que está presente en los países en desarrollo y desarrollados y, por lo general, no es visibilizado por sus comunidades.