El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Agropecuaria de San Rafael, Nicolás Martínez Araujo, consultado por FM Vos (94.5) y Diario San Rafael, expresó sus puntos de vista respecto al año que ha terminado.
“Ha sido un año atípico, difícil. La pandemia poco a poco nos fue permitiendo volver a ciertas normalidades y ritmos de trabajo; hemos podido volver a enfocarnos más en nuestra actividades, y menos en lo sanitario. También se ha puesto de manifiesto que los problemas estructurales del país siguen existiendo; se han vuelto a notar todas aquellas cuestiones que condicionan nuestras actividades, y esto nos obliga a pensar en cómo resolver los temas estructurales que condicionan un crecimiento sostenido. A la vez hemos tenido un año electoral, y esto parece que en Argentina paraliza la gestión, es lamentable, pero real. Las gestiones políticas van de elección en elección; lamentablemente, en Argentina tenemos elecciones cada dos años. Reitero que ha sido un año difícil y recién en estos momentos, todas las actividades están volviendo a tener niveles de actividad similares a la pre pandemia. Igualmente, no tenemos el ritmo de desarrollo que necesitamos. Sería bueno poder salir a atacar el desarrollo con más vigor, fuerza y contundencia, pero al no solucionarse cuestiones estructurales de la economía, es difícil que tengamos buenos ritmos de desarrollo”. Le consultamos su opinión respecto al consenso fiscal pactado entre el gobierno nacional y las provincias. “Nosotros, juntamente con la Unión Industrial de Mendoza, elaboramos un comunicado en el que expresamos que creemos que este tipo de acuerdos no sirve. Si bien Mendoza firma el consenso por diversas cuestiones, y se compromete a no aumentar la carga impositiva, ni a crear nuevos impuestos, nosotros creemos que el camino debe ir por la optimización del gasto, entendiendo que solo podemos gastar lo que recaudamos. No es bueno que se formen este tipo de convenios, porque a pesar del compromiso del gobierno provincial de no incrementar los impuestos, concluimos que la política sigue estando lejos de las necesidades de la gente de trabajo. El emprendedor está cansado de pagar impuestos, y de ver que sus impuestos no retornan con servicios de excelencia, sino que simplemente financian un estado cada día mas ineficiente. Esto nos pone en contra de cualquier situación que le permita al estado seguir ahogando la actividad privada. Creemos que la situación de los privados no da para más; no hay forma de que puedan sacarnos un peso más, ya que estamos al límite de nuestra capacidad de pagar impuestos. Esto se refleja claramente en los niveles de evasión fiscal; hay gente que está dejando de pagar impuestos, o buscando la manera de pagar lo menos posible. Las actividades que pagan el 100 % de sus impuestos, no poseen viabilidad económica. Entonces nos obligan a trabajar en un rango de informalidad que no es lo conveniente. Dentro del rango de respeto a la institucionalidad, cada uno hace lo que puede. No podemos propagar ideas que fomenten la evasión, pero entendemos a los privados que la practican”.
También le consultamos sobre la posición de la Cámara respecto a la exigencias de la empresas hacia su personal para que estén vacunados para poder trabajar “Nosotros respetamos la libertad de decisión de las personas. Creemos que el camino es convencer; evidentemente, la realidad indica que el mejoramiento de las condiciones sanitarias referidas a la pandemia, han mejorado por la aplicación de las vacunas. El camino en convencer, y no relajarnos en temas como los protocolos necesarios, y respetar las normas de trabajo. No creemos que la solución esté por el lado de la obligatoriedad”.
