Después de haber aprobado la consagración a las parejas del mismo sexo, el Papa Francisco volvió al respecto y defendió su postura. En ese sentido, cuestionó: “Se escandalizan si le doy la bendición a un homosexual, pero no si se la doy a un empresario que quizás explota a la gente”.
El Sumo Pontífice explicó en la revista Credere: “No bendigo un ‘matrimonio homosexual’, bendigo a dos personas que se aman y les pido también que recen por mí”. Al respecto, mencionó: “Siempre en las confesiones, cuando llegan estas situaciones, personas homosexuales, personas casadas nuevamente, siempre rezo y bendigo. La bendición no se le debe negar a nadie. Todos, todos, todos”.
Sin embargo, hizo una distinción de las personas “que son capaces de recibir el Bautismo”. Tras esto, el Papa Francisco señaló que “los pecados más graves son aquellos que se disfrazan con una apariencia más ‘angelical’”. Fue así que sentenció: “Nadie se escandaliza si doy mi bendición a un empresario que quizás explota a la gente: y esto es un pecado gravísimo. Mientras se escandalizan si se la doy a un homosexual”.
A esto lo calificó como una “hipocresía”: “Todos debemos respetarnos unos a otros. ¡Todos! El corazón del documento es la acogida”.
El Papa Francisco habló sobre la presencia de la mujer en la Iglesia
Por otro lado, en la misma entrevista, el excardenal Jorge Bergoglio reflexionó sobre el rol de las mujeres en la Iglesia católica, e hizo una distinción entre el principio petrino y el principio mariano. En este contexto, indicó que “la Iglesia es mujer, es esposa” y “Pietro no es una mujer, no es una esposa”: “La Iglesia como esposa es más importante que Pedro como ministro”, declaró.
No obstante, remarcó que “es importante abrir el trabajo en la Curia a las mujeres”: “Lo más importante no es el papel ministerial de las mujeres, pero la presencia de las mujeres es fundamental”.
Fuente: Radio Mitre
