Por la crisis ya cierran fábricas de cerveza artesanal

Las fábricas de cerveza artesanal atraviesan una crisis terminal, con una caída del 90% de sus ventas ya que sus principales compradores, bares y restaurantes, están cerrados. En este panorama, ya cerraron dos empresas y el 70% corre riesgo de hacerlo en los próximos días.
Martín Bessega, presidente de la Cámara Mendocina de Cerveza Artesanal, relató que han pedido que los emprendimientos que funcionan tipo bar con recarga de cerveza puedan abrir como negocio de proximidad para minimizar el fuerte impacto en el sector.
Según un estudio realizado por la cámara cervecera, del que participaron 590 productores y bares de cerveza artesanal, el sector tuvo una caída del 90% en sus ventas desde el 16 de marzo en adelante, ya que cerca del 80% de las empresas vende casi la totalidad de su producción a bares y restaurantes que hoy están cerrados por las restricciones impuestas por el aislamiento social, preventivo y obligatorio.
“Estamos muy complicados, desde los cerveceros hemos adherido a la cuarentena pero estamos llegando a niveles en que han empezado a cerrar fábricas, la semana pasada cerraron dos, viene complicada la mano, hicimos algunos pedidos, si bien desde el Gobierno de Mendoza han estado en contacto, la ayuda nacional no llega, no solo acá sino a nivel país”, dijo Bessega a FM Vos (94.5) y Diario San Rafael.
Las ventas han caído 90 por ciento, aseguran en el sector, y añaden que en abril no se ha vendido nada más que lo que se puede hacer de venta minorista e incluso esta actividad ha sido interrumpida en municipios al considerar que venden alcohol.
En cuanto a los créditos disponibles que lanzó el Gobierno nacional, rechazados por la mayoría, el titular de la cámara de cerveceros dijo que “son emprendimientos familiares donde trabaja a lo mejor padre e hijo o una pareja, por eso esos créditos no son apropiados para nosotros, tienen problemas con las garantías, planteamos al Gobierno que como están abiertos kioscos o almacenes, se permita a las fábricas que pueden recargar botellones, habilitarlos con los protocolos, pero por ahora sin respuesta”.
Se considera que esa actividad haría que “tuviéramos algo de movimiento en bares de cercanía. No solo van a cerrar las fábricas, sino la mitad de los bares van a quedar en el camino; San Rafael tiene una zona de bares importante, en la ciudad de Mendoza la actividad es un 60% gastronómica y tres meses cerrados es mortal, no hay quien lo pueda aguantar”.
Bessega dijo que no hay forma de competir con las cervezas industriales. “La gran mayoría de las cervecerías artesanales que tenían empleados los están sacando porque no pueden pagarles el sueldo; hay unas 600 familias empleadas en el sector y de eso el 70% corre serio riesgo de cerrar, un 30% tiene otros trabajos y puede subsistir”.