Luego de la pandemia de covid 19, fueron muchos los servicios del sector público y privado que retornaron a la presencialidad. Llamativamente, una de las preocupaciones que han reportado las autoridades asistenciales es que muchos mendocinos solicitan turnos médicos para poder ser atendidos, pero luego no asisten.
A la hora de justificar los motivos de la deserción, las autoridades explicaron que las causas son varias. Entre ellas, muchas personas resuelven el problema de salud antes de que llegue el turno asignado, mientras que otros, en cambio, olvidan el día del mismo, por la larga espera que pasan entre que se lo otorgan y que se concreta.
De acuerdo con un informe elaborado por El Sol, una de las mayores quejas por parte de los pacientes es la larga espera que tienen que afrontar para poder alcanzar un turno.
Según el Ministerio de Salud, en el sector público la espera no supera los 15 días, en tanto, en la parte privada, el promedio es de hasta dos meses.
Sector Público: lidera el nivel de ausentismo
Si bien la situación se replica tanto en el sector público como privado, es en el primero donde mayor cantidad de ausentismo se observa.
Los datos oficiales indican que de 2.500 turnos que se otorgan a diario a través del 148, línea que dispensa turnos para los Centros de salud del Gran Mendoza y el hospital Central, un 40% de ese total queda vacante, es decir, 1.000 mendocinos que solicitaron turnos para alguna especialidad no asisten a la consulta.
Las especialidades más demandadas en los centros de salud son: pediatría, clínica médica, ginecología y odontología. En tanto, en los hospitales públicos, los servicios más requeridos varían según el efector. En el Central, por ejemplo, una de las especialidades más solicitadas son traumatología, neurocirugía, neurología.
La justificación a la inasistencia de la gente tiene que ver con que muchas de las personas que solicitan un turno, por lo general, lo requieren de manera inmediata, casi urgente, por lo que frente a la situación, buscan soluciones en otros consultorios públicos o privados y desestiman el turno otorgado para dentro de unos días.
El error es que no consideran la posibilidad de cancelar ese turno dado, para que luego pueda ser utilizado por otro paciente.
El Lagomaggiore cuenta con un sistema de turnos que se genera de manera virtual mediante un número de WhatsApp. El 90% de las especialidades procesa los turnos bajo esa metodología, en tanto, sólo el 10% de los pacientes debe requerir su consulta de manera presencial.
La directora del nosocomio, Roxana Cabrera, aseguró que “los índices de deserción han bajado notablemente desde la implementación de los turnos virtuales”. De este modo, el nosocomio consigna por mes se otorgan unos 5.200 turnos, de ese total, sólo el 20% presenta ausentismo.
La situación en el sector privado
En las clínicas y sanatorios privados también existe la falta de compromiso de los pacientes a la hora de cumplir con los turnos asignados. El problema es que en el ámbito privado el otorgamiento de turnos tiene una demora de hasta 60 días, que varía de acuerdo con las especialidades, pero la espera es mucha y por ello los pacientes no asisten.
Rodolfo Torres, de la Asociación de Clínicas y Sanatorios (Aclisa), sostuvo que “en promedio ha observado entre un 25% y 30% de inasistencia”.
El coordinador de la entidad manifestó que existen dos motivos por la que se pierden los turnos: uno de ellos, tiene que ver con la espacialidad en el otorgamiento y la otra, con la falta de control respecto a si la persona cumplirá o no con su solicitud. El mayor incumplimiento se observa en Pediatría y Clínica médica.
Fuente: El Sol
