Un nuevo episodio con un colectivo que sufrió la salida de una rueda reavivó los reclamos de los vecinos de Punta del Agua por el mal estado de la Ruta Provincial 190 y las condiciones en las que se presta el servicio de transporte público. Apuntan a responsabilidades compartidas entre la empresa y el Estado provincial, y piden inversión urgente para garantizar seguridad y conectividad.
Un nuevo incidente vial volvió a poner en el centro de la escena la delicada situación de la Ruta Provincial 190, el camino de tierra que conecta la Ruta Nacional 143 con Punta del Agua. En esta oportunidad, un colectivo que realizaba el recorrido sufrió la salida de una rueda, un hecho que no es aislado y que, según advierten los vecinos, se repite como consecuencia del deterioro del camino y de las condiciones mecánicas de las unidades que circulan por la zona.
Juan José Bravo, vecino de Punta del Agua, explicó en diálogo con Diario San Rafael y FM Vos 94.5 que el problema tiene múltiples aristas y responsabilidades compartidas. “Yo creo que las dos cosas influyen: por un lado, que la ruta necesita un mejor mantenimiento, y por otro lado, que la empresa es responsable de la movilidad que envía a la zona del campo”, señaló. En ese sentido, sostuvo que las unidades que recorren estos trayectos rurales “tienen que ser unidades preparadas y revisadas permanentemente”.
El episodio ocurrió cuando el colectivo regresaba desde Punta del Agua hacia General Alvear. Bravo detalló que el servicio cuenta actualmente con 3 frecuencias semanales, los lunes, miércoles y viernes, aunque el recorrido hacia Agua Escondida se encuentra suspendido desde hace algunas semanas. “Esta vez el colectivo iba desde Punta del Agua hacia General Alvear, porque el servicio a Agua Escondida está suspendido”, precisó.
La empresa a cargo del servicio es La Unión, que cubre la mayor parte de los distritos del Departamento de General Alvear. Para el vecino, la empresa no puede desligarse de lo ocurrido. “Si la empresa tomó conocimiento de que el colectivo iba en esas condiciones, podrían haber enviado un refuerzo para trasladar a los pasajeros de forma más segura”, afirmó, y agregó que, según los propios pasajeros, “el colectivo ya había salido de Punta del Agua con complicaciones”.
En cuanto al estado de la ruta, Bravo explicó que el principal problema actualmente es el “serrucho” que se forma por el tránsito constante de vehículos y camiones con carga pesada. “Si no se hace un mantenimiento seguido, el camino termina siendo muy complicado para transitar”, advirtió. Si bien reconoció que se realizaron algunos trabajos con material árido para solucionar reventones, consideró que no son suficientes. “No son muchas las máquinas que hay disponibles y hay un problema estructural desde arriba, porque no se aporta la maquinaria necesaria”, expresó.
El vecino también apuntó a la Dirección Provincial de Vialidad y a la falta de una respuesta clara en cuanto a jurisdicciones. “La palabra lo dice, es Dirección Provincial de Vialidad. Para un área provincial no debería haber jurisdicción”, sostuvo. Según relató, desde el organismo les indicaron que el mantenimiento del tramo entre Agua Escondida y Punta del Agua debía hacerlo el personal de Malargüe, pero hasta el momento “estamos esperando y la gente no llega”.
Más allá de los trabajos puntuales, Bravo insistió en la necesidad de una inversión de fondo. “Si no hay inversión en la ruta provincial, cada vez se va a deteriorar más”, afirmó. Y agregó: “Se hacen rellenos, se pasa la máquina una semana, pero después vuelve el problema por la cantidad de vehículos que transitan”.
Respecto del incidente puntual, confirmó que no hubo personas lesionadas. “Gracias a Dios no hubo grandes complicaciones, más allá del susto, pero podría haber sido mucho más grave”, remarcó. Además, alertó sobre el riesgo que implicó que el desperfecto ocurriera ya sobre asfalto. “Ocurrió en la Ruta Nacional 143, ya iban en asfalto, y eso lo hace todavía más peligroso”, dijo.
El reclamo de los vecinos no se limita solo a la seguridad vial, sino también a la continuidad del servicio. Bravo recordó que semanas atrás la empresa había intentado eliminar la frecuencia de los miércoles. “Nos quisieron sacar esa frecuencia y para los vecinos fue una tomada de pelo”, expresó. La situación generó reclamos y publicaciones en redes sociales, lo que finalmente derivó en la restitución del servicio. “Punta del Agua está en temporada de turismo y hay mucha gente que no tiene movilidad propia”, explicó, al remarcar la importancia del transporte público para residentes y visitantes.
Otro punto señalado fue la falta de infraestructura de la empresa en la localidad. “En Punta del Agua no hay ningún taller, solo un lugar de parada y venta de pasajes”, indicó Bravo. Consideró que, teniendo en cuenta que los colectivos recorren más de 90 kilómetros de caminos de tierra hasta Agua Escondida y otros 25 kilómetros hacia La Ahumada, “sería muy necesario contar con alguien que verifique si el colectivo está en condiciones de continuar”.
Finalmente, el vecino planteó una crítica más amplia sobre la distribución de fondos públicos. “Lo que más nos molesta a los vecinos es que no se tenga en cuenta un fondo para mejorar la conectividad terrestre”, manifestó. Y agregó: “No lo digo desde un punto de vista político, sino desde la necesidad de invertir en Punta del Agua y pensar por qué no se destinaron recursos para mejorar o asfaltar nuestra ruta”.
