Tras el paro de 48 horas organizado por el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE), que registró un importante acatamiento, y la multitudinaria movilización por las calles del centro de Ciudad, este jueves los referentes del gremio volverán a sentarse en la mesa paritaria con los representantes del Gobierno para escuchar una nueva oferta de aumento salarial que, según anticipó el gobernador Rodolfo Suarez, será superadora de la inicial.
También regresará la normalidad a la actividad escolar, después de la medida de fuerza que fue catalogada como «histórica» por el SUTE, por el alto nivel de adhesión, cercano al 90% de acuerdo con su relevamiento. Para la Dirección General de Escuelas, en cambio, no llegó al 50%.
Más allá de ese contrapunto por el acatamiento, el gremio conducido por dirigentes ligados al kirchnerismo llegará fortalecido a la reunión que comenzará a las 9 en el Centro de Congresos y Exposiciones.
El Ejecutivo adelantó que llevará una oferta superadora a la mesa de negociación. «He instruido mejorar la propuesta económica, recordando que la provincia solo se financia con los recursos de los contribuyentes, ya que no emite dinero y, por cierto, viene siendo discriminada constantemente por la Nación», anunció Suarez este miércoles a través de Twitter.
La propuesta inicial del Gobierno incluyó de un 5% de incremento en julio (que ya estaba anunciado), 12% en agosto (al 5% ya estipulado se sumó otro 7%), que se completa con otros tramos de 5% en septiembre, octubre y noviembre. Tras el rechazo del SUTE, se decidió pasar a un cuarto intermedio hasta este jueves.
Por ese motivo, para el ministro de Gobierno, Víctor Ibañez, se trató de un paro «político» e «insólito», ya que se desarrolló en medio de las negociaciones.
“Es un paro insólito del punto de vista que la mesa paritaria de revisión fue adelantada por decisión del gobernador, anunciada en tiempo y forma. Esto tiene que ver con un paro político”, sostuvo el funcionario.
El ministro de Hacienda, Víctor Fayad, ratificó que se presentará una propuesta superadora, «sin hipotecar la provincia ni romper con el equilibrio fiscal». Además, descartó de lleno la posibilidad de incorporar la cláusula gatillo para actualizar los sueldos, como ocurrió durante la administración de Alfredo Cornejo.
Fuente: El Sol
